Una (a)puesta en común.

Cada vez son más las empresas que parecen entender la necesidad de comprometerse con proyectos de interés general a través de diversas fórmulas de colaboración. Una apuesta admirable cuyo fomento y mantenimiento, en los tiempos que corren, adquiere todavía mucho más valor si cabe.
En los últimos años la responsabilidad social corporativa ha ido paulatinamente ocupando un lugar mucho más importante dentro de las estrategias empresariales, incluso dado el contexto socioeconómico actual. Y es que han sido y son muchas las organizaciones que han decidido destinar mayores esfuerzos a colaborar con el entorno social y medioambiental. Una decisión totalmente voluntaria y muy meritoria, especialmente en las empresas de menor tamaño cuyos recursos son más limitados.

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Dicho compromiso abarca múltiples ámbitos, siendo la sociedad y el medio ambiente los principales destinatarios de un sinfín de estrategias empresariales que pretenden, por una parte, reinvertir y compartir beneficios y, por otra, responder a las preocupaciones suscitadas por unexigente sistema de producción y comercialización.  No obstante, bien sea a nivel local o global, de dimensión interna o externa, más o menos creativas, cada una de estas iniciativas pretende impulsar proyectos que generen un bienestar común y/o hacer partícipe a la organización en programas que mejoren la calidad de vida de todos a través de un crecimiento económico sostenible y una mayor cohesión social.
Dejando al margen posibles cuestiones en torno al carácter altruista de algunas acciones de responsabilidad social corporativa, es indudable que se está produciendo una transformación en la mentalidad y el comportamiento del tejido empresarial que deriva hacia un modelo de gestión más humano y terrenal en el que las nuevas tecnologías, especialmente las redes sociales, contribuyen de forma decisiva a este proceso con un feedback directo sin precedentes. Un cambio notorio que representa ya unantes y un después y que coincide con una economía muy global y feroz en la que afortunadamente las empresas tienen otras inquietudes, más allá de vender.

Periódico ESCAPARATE. Suplemento de economía (Abril-Mayo 2012)
Versión ESCAPARATEDIGITAL.COM