Hacer pausas de vez en cuando vienen bien, ahora es el momento, tras este largo año lleno de acontecimientos, es hora de cerrar pero no el balance,no.
Cerrar ciclos vitales, esta palabra le gusta mucho a un buen amigo, cerrar historias que no llevan a ningún sitio, que un día avanzan y otro mueren,
y recomponerse, recoger lo que sea necesario para continuar ese camino que en breves días será un año más de vida, y dejar a un lado aquello que ya pesa demasiado, que a pesar de los intentos no ha podido vislumbrar la luz.
Volveré, no digo cuando, sin fechas, es algo que quiero hacer este año, sin plazos para nada, sólo disfrutar del momento, 49 años ya es una cifra importante en la que hay que decidir que se tira por la borda del barco y con que continuar navegando, para llegado el momento de reunirme con aquellos que ya pasean en ese Itaca que nos alcanza a todos, tarde o temprano, hacerlo con la conciencia limpia y el corazón sosegado y sobre todo sabiendo que se hizo lo imposible por recuperar lo perdido, pero latiendo por los nuevos sueños que quedan, que fluyen y que se podré hacer realidad, con mi empeño y mi rebeldía, con mi curiosidad.
Sin pensar en el mañana, sólo existe el hoy que es lo que tenemos, presente... VIVAMOS. SONRIAMOS ...........
Marijose.- Hasta pronto amigos