Una cuestión de imagen
Publicado el 25 enero 2017 por RicardogarciCon la misma intensidad que el culpable proclama su inocencia, los políticos de los partidos en el poder suelen reivindicar para sí una imagen moral intachable: son honrados, trabajan mucho y únicamente miran el bien común. Cuando los conoces, te sientes como si tropezaras con la nada. Te das cuenta de que el esfuerzo titánico que les ha supuesto construir y sostener esa imagen los ha convertido en personajes vacíos, sonrientes y políticamente muy correctos. Se han absuelto a sí mismos de su mediocridad para seguir en ella. Tropezar con la nada… He de reconocer que conocí la excepción en un Consejero de Cultura: hombre lúcido, con carácter y de gran bagaje intelectual. Lo último que supe de él es que dimitió de su cargo. Siempre se van los mejores. Los que no lo son creen emanar una vibración que baja hasta ellos desde la Corona. Lo grotesco es que dan por hecho que lo damos por hecho y se limitan a hacer como que hacen. Ponen sus pies en el terreno de lo risible y emanan hacia arriba, hasta la Corona, la pompa desbaratada y la circunstancia adversa. Los súbditos del Reino cada día se obnubilan menos con la magia delpoder. Quienes lo ostentan han caído en su propio hechizo.
Ricardo García Nieto.