Título original:The Unexpected Guest
Autor: Ágatha Christie (novelización por Charles Osborne)
Editorial: Plaza & Janés, De Bolsillo
Año publicación: 2001 (1958)
Traducción por: Melissa Arcos
Género: Novela, Suspenso
Sinopsis: Tras perderse en una carretera de Gales en una noche de tormenta Michael Starkwedder se acerca a una mansión para pedir ayuda, pero cuando entra en la casa se encuentra a un hombre en silla de ruedas muerto de un disparo en la cabeza y a una mujer con un revólver en la mano. Ésta, Laura Warwick, afirma ser la esposa del hombre que acaba de morir, un hombre cruel, egoista y despiadado, y se confiesa culpable del asesinato.
Pero algo en aquella extraña escena no encaja para Starkwedder, todos los hechos parecen evidentes... demasiado evidentes, así que decide no llamar a la policía. En la casa viven más personas y todos ellos son sospechosos del asesinato. ¿Fue Laura Warwick la que mató a su marido? ¿O fue el mayordomo? ¿Y la madre? ¿o el hermano del señor Warwick? Todos parecen tener motivos para haber acabado con la vida del señor de la casa, pero... ¿quién lo hizo y por qué?
Esta magnífica pieza teatral, una de las más célebres de Agatha Christie, mantiene en vilo al espectador hasta el último segundo a lo largo de una trama magistralmente entretejida.
Opinión personal: Este libro lo había comenzado a leer, y me enojé tanto con la protagonista que lo dejé a la mitad. Un año después, con motivo del BUAtón y como parte de mis propósitos de año nuevo de no dejar cosas a medias, lo volví a abrir. Bueno, tuve que empezarlo de nuevo porque ya no recordaba nada de la historia, por lo que tuve la oportunidad de mirar con otros ojos la trama. Esta vez me atrapó y no me dejó ir hasta que lo terminé.
Este libro fue originalmente una obra de teatro escrita por la autora, y la versión que llega a mis manos es una novelización a partir de dicha obra, realizada por otro autor. Dicho esto, voy a reconocer que se nota mucho en ciertos párrafos que las descripciones del ambiente son sacadas de un texto teatral. La utilización de frases como "en el fondo" o "salió de la habitación y él cerró la puerta (sin más descripción que ésa y como final de un capítulo)" me hizo imaginarme como público de la representación y me recordó mis primeras lecturas de obras de teatro para la escuela cuando era chica. Me gustó mucho, aunque eso no quita el hecho de que quien hizo la adaptación podría haberle dado más emoción a esas partes que uno debe imaginarse mientras lee.
La historia se centra en Michael Starkwedder, el visitante inesperado, que va a pedir ayuda a un caserón del sur de Gales por un inconveniente con su auto en el camino, debido a la niebla. Toca varias veces y al ver que nadie le atiende ve una contraventana abierta y decide ingresar en lugar de volver por donde llegó. Entonces se encuentra con el dueño de casa, un hombre en silla de ruedas, asesinado de un tiro en la cabeza en la oscuridad. Al encender la luz, espantado, ve a una hermosa mujer con el arma homicida en la mano. Ella confiesa ser la asesina, y exige terminar con todo de una vez llamando a la policía.
Parecería muy simple para un extraño que acaba de llegar, pero la verdad es que algo no encaja para Starkwedder, que se ha enamorado a primera vista de la joven y decide ayudarla. Todo va bien, la simulación frente a la policía y al resto de los habitantes de la casa deja a Laura Warwick (la presunta asesina) fuera de sospechas, pero las cosas se complican al ir conociendo al resto de los miembros de esa extraña familia. Además, aparece el apuesto y prometedor candidato a diputado Julian Farrar, que era a la vez amigo del difunto y amante de su esposa. Al ir conociendo a cada uno de los Warwick y mientras más avanza la trama, es más claro que Laura no pudo haber sido la asesina y que cada uno de los que está allí tiene buenas razones para estar envueltos en el asunto. La relación de Laura y Farrar deja a Starkwedder decepcionado, pero ya está involucrado y es un cómplice más, ¿qué ocurrirá a partir de entonces?
Bueno, no puedo decir más, porque allí empieza lo bueno de la historia. Reconozco que me enojé tanto con Laura por la forma en que le admite a Starkwedder que él sale sobrando en toda la situación que abandoné el libro por un buen tiempo, pero si lo pensamos ella tiene razón. En el momento no lo noté, pero ¿cómo se va a meter en una casa sólo porque la puerta está abierta? Y eso de ir a enamorarse a primera vista de una presunta asesina es de lo más tonto que podía hacer el hombre. No obstante, todo tiene su explicación y aunque no lo crean, cuando las cosas llegan al final éstas preguntas y muchas más obtienen su respuesta. Es increíble pero ¡todo tiene sentido!
Lo único que no me gustó fue el personaje de Laura Warwick, su resignación y su entrega ciega a su destino, su aceptación de ciertas cosas que ocurren es casi insultante. Aunque podría ser admirable su espíritu de lucha y su fortaleza para hacer todo lo que esté en sus manos por aquellos a los que quiere.
Me encantó el final, la verdad es que casi no me lo esperaba, y digo casi porque la trama se retuerce tanto que uno llega a sospechar de todos. Me encantó eso, mis sospechas fueron girando por todos los personajes hasta regresar al mismo lugar y luego pasar de largo.
Lo mejor de este género de novelas es que uno hace una carrera contra el autor en la tarea de descubrir al verdadero asesino, y lo que más me gusta es cuando el lector no puede ganar tan fácilmente. Creo que si le pusiera un título alternativo a este libro sería:¿Quién no mató al señor Warwick?
Hasta yo puedo haberlo hecho, jeje. El muerto había sido un sujeto tan desagradable, tan malvado y lleno de defectos,¿Lo recomiendo?: Por supuesto que sí. La historia está narrada con mucha simpleza, ya que en su origen era una obra teatral, y la trama es intrincada porque nos hace dudar de todo y de todos. Hay un crimen, un montón de familiares de lo más raros y hasta una semi-historia de amor en el fondo de todo.
Puntaje: