La semana pasada os enseñaba mi ingenua lista de deseos para esta primavera, aprovechando mi escapada a España. Y os preguntaréis ¿ingenua, por qué? Ingenua porque en mis manos no ha caído nada, nadita de lo que había en aquella entrada. Algunas cosas no las encontré en las tiendas, otras resultaron muy caras para mi maltrecha economía o no fueron lo que esperaba. Con un par de ellas estuve dudando hasta el último minuto. Y el resultado... bueno, ya lo sabéis.Sin embargo sí que me he traído otras cosillas, pocas pero elegidas, que os enseñaré en cuanto encuentre el momento y la luz adecuada para hacerles fotos. También me he traído algún que otro deseo, que sólo se ha quedado en eso. En concreto son estas sandalias de Uterqüe que me parecieron buenas, bonitas y cómodas (aptas para el verano romano), las que ocupan ahora mis pensamientos. Pero los 129 € que cuestan me impiden encontrar una razón válida para comprarlas. Suspiro suspiro.
Las hay en azul y en marrón, no sabría con cual quedarme. ¿Qué decís? Voy a rezar para que en las rebajas no hayan desaparecido, aunque tengo pocas esperanzas.
¡Que tengáis un buen lunes!