Este año mis vacaciones, que comenzaron la semana pasada, se prevén diferentes. Desde hace muchos años, dedico este tiempo de descanso para hacer voluntariado; Vall d’Hebron, banco de los alimentos, etc.En esta ocasión realizo, por un lado, un sueño muy esperado desde hace 3 años; amueblar la cede que por fin hemos conseguido para la organización solidaria de la que soy secretaria en Barcelona, y por otro enviar medicamentos a Venezuela.Me dedico a comprar muebles en wallapop, cargarlos, colocarlos, limpiar….Pero hay algo más importante que amueblar nuestra cede; lograr conseguir una lista enorme de medicamentos que nos han pedido desde Caracas. Es muy complicado, porque una vez consigues los medicamentos (comprándolos o por donaciones) tienes que conseguir mucho dinero para enviarlos, 12 euros 1 kilo. Además, se añade otro hándicap, los medicamentos solo pueden ocupar un 30% del peso, lo demás, tiene que ser productos de higiene personal, ropa, comida, etc ( con su consabido gasto) Os garantizo que si no estáis metido en “El ajo” no os podréis imaginar lo complicado y costoso que es.Pero la gente es muy solidaria, y cuando le explicas el proyecto, siempre responden de una manera u otra.
Estas son mis vacaciones, las mejores que podía tener ya que me propoercionan el equilibrio y la paz que necesito.