Valora lo que tienes.

Hoy hemos arrancado una página del diario de Maribel Aparicio. Una reflexión quizás tan tópica como valorar aquello que tenemos. Una reflexión que considero que se debe hablar de ella una y otra vez porque siempre serán pocas y porque, ¿quién no ha tropezado alguna vez con este error?

Creo que no somos conscientes muchas veces de lo afortunados que somos, de rodearnos de gente que nos quiere, padres, hermanos, vecinos, amigos y si tienes pareja, también de nuestra pareja. En este caso me gustaría hacer una reflexión sobre el día de los difuntos y es que parece, que el mañana nunca existe y que todos nos veremos mañana. ¿Y si no existe el mañana? El tiempo es algo que pasa y que nosotros estamos tan ocupados viviendo nuestra vida con las prisas de siempre, los humos, el tráfico, el sudor de la persona que nos hace apartar la cara (pero no el cuerpo porque no te puedes mover) en ese medio que te desplazas para ir a ese lugar llamado “obligación”.

Y es que hace poco, mi tiempo se paró, hiriendo los sentimientos de alguien muy importante para mí a pesar de conocernos muy poco. Él me ha cambiado la vida. Hacía que sonriera, al menos por una décima de segundo al ver un Whatsapp suyo por las mañanas. Y notar como ahora mi cara ya no es la misma al ver que no me llega nada suyo, hace que exista un vacío en mi interior y comprobar lo importante que es él para mí.
Aunque me he disculpado con él, sigue herido con aquellas palabras tan amargas que le dije. Todavía me discrimina con las peores de las palabras que puede decir alguien. El sonido del silencio.
No sé que más hacer, pero hace que reflexione sobre lo que tengo, porque puede que tal vez, en otro momento sea demasiado tarde para arrepentirse y echar camino hacia atrás. Mi mayor consejo para los lectores es, vive y disfruta el momento como si no existiera un mañana, porque tal vez mañana sea demasiado tarde.