No pedimos tanto. Una sonrisa en el lector para que, por lo menos, hable de nosotros cuando cene con los amigos. Los creativos siguen y seguimos innovando y encontrando esas pequeñas cosas de la vida cotidiana que todos podemos entender que nos llevan a decir algo así como: "¡Qué bien pensado!".
GHoy: Guinness, qué bien pensado.