Viajando con Maria

Desde el sábado hasta el lunes a mediodía lo pasé enterito (las 24h) con mi fierecilla, hicimos maletas y nos embarcamos a la aventura, bueno...lo de la aventura es un decir...sabíamos dónde íbamos, por lo menos yo, pero no dejaba de ser una aventura ya que me cargué con una maleta enorme(para 2 días) y el cochecito de la niña...y la niña, claro, rumbo a la playa en tren.
Aprovecho para poner una queja a los trenes de la Renfe, NO HAY RAMPAS EN TODOS LOS TRENES, ¿¿¿porqué???
Mientras esperaba nuestro tren pasaron dos que sí tenían rampa, por lo que al verlo me situé en posición, en la puerta de embarque por la rampa...pero justamente mi tren, el tren que iba a nuestro destino...ese no traía rampa, y si tardo un poco más en averiguarlo nos quedamos en tierra.Por suerte siempre hay algún buen samaritano que se compadece de una pobre chica con un peazo maleta y una niña con su sillita intentando subir al tren.
Desde aquí agradezco a  todas esas personas que este fin de semana me han ayudado a subir y a bajar del tren, ya sé que iba muy cargada, así que gracias doblemente.
Ni yo creí que lo lograría!!
Pero no solo lo logré, sino que además llegué a destino con mi niña y nos dispusimos a pasar un fin de semana maravilloso juntas, y también junto a unos amigos blogueros con su hijo con los que allí habíamos quedado.
Me vino muy bien irme sola con la fierecilla, es una gozada haber disfrutado de la playa, el sol, el césped, la lluvia...sí sí, porque nos llovió toda la tarde del sábado también, pero como regalo de despedida, el domingo hizo un sol resplandeciente.
Disfruté de ... 
Levantarme con la fierecilla en la camita de al lado, en la cual durmió de un tirón toda la noche sin ninguna interrupción, no tiene precio. Escuchar a media noche "mami la mà"y alargar el brazo y darme cuenta de que la tengo justo al ladito y darle mi mano mientras ella se sujeta con fuerza...eso no tiene precio. Ver la carita de felicidad de mi fierecilla al ver el mar, al correr por la arena, a mojarse los pies con las olas...eso no tiene precio.
Participar en todas y cada una de las actividades de tu hija durante todo el día...eso no tiene precio. Y como broche final...escuchar y sentir cada dos por tres "mami, tatton" (ahora es así como dice "mami, t'estimo"...osea, que me quiere)y besarte mientras te lo dice y besarte aunque no te lo diga...eso, no tiene precio.
Así que sí, hemos pasado un finde genial, y todo eso a pesar de que mi jefa no me concedió el lunes puente para poder transformar esos 2 días en 4, eso no tiene nombre, solo espero que jamás me pida un favor porque ya tengo la respuesta, ¿esa es forma de mantener felices a los empleados?.
Al llegar a casa, en cuanto la fierecilla entró por la puerta dijo...no mami nooo...patcha... Jajaja...la niña no quería volver a casa, quería irse de nuevo,a  la playa!! (patcha-platja, en catalán) y es que cada día me doy cuenta de que más y más se va pareciendo a mi...yo tampoco quería ver mi casa ni en pintura, solo quería playa también.

Está claro que habrá que repetir:)