Revista Literatura

Viejos locos

Publicado el 09 julio 2020 por Netomancia @netomancia

El viejo Solís estaba loco. Cada noche salía a la terraza para lanzar insultos al aire, que se escuchaban en toda la manzana.

Y se veía venir que el otro loco de la calle, el viejo Iriarte, en cualquier momento le salía al cruce.

Fue así como durante cinco días los insultos iban y venían por el aire, de techo en techo, y nosotros, en nuestros hogares, tratando que las palabras y gritos no llegaran a oídos de los más pequeños.

Fueron cinco días nada más porque la señora María Rosa, la que hace pastelitos cada sábado y los regala en la plaza, se asomó por la ventana con el rifle de caza que había pertenecido a su difunto marido y los bajó de un tiro en la sien a cada uno.

Nuevamente las noches se viven en paz en el barrio.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas