El color es el factor más importante en la decoración y el primer gran aliado cuando se quiere transformar la casa. Aunque existe una enorme paleta de colores entre los que puedes escoger, los más comunes y fáciles de trabajar son los tonos naturales, que consiguen un ambiente sedante sin llegar a ser aburridos. En esta nota te explicamos cómo usarlos y combinarlos.
Los neutros más eficaces son los que presentan los materiales naturales, con su propio color y textura. Algunos de estos materiales son el coco, el sisal, el junco y el yute para los estores y las moquetas, y el algodón sin blanquear, las lonas crudas, la seda natural, las muselinas de color blanco roto y los encajes y visillos para tratamientos de ventanas y colchas.
El verde es un color especial para conseguir un ambiente natural; es el color de las hojas, el musgo y la hierba de los prados. Las paredes de esta habitación se han pintado en un color verde claro para conseguir un agradable espacio rústico. El tiempo ha suavizado y envejecido las paredes y la madera consiguiendo una sensación de pacífico aire campestre y los accesorios como los platos pintados y las flores silvestres también colaboran.
En cuestión de accesorios y muebles se utilizan el mimbre, la caña y el bambú, y para tapicerías la lana, los tweeds o los linos de colores. Finalmente se encuentran el cobre y el latón, la reluciente plata o el suave peltre, en accesorios como lámparas, esculturas, marcos y otros adornos.
Tratamientos para las paredes
Las paredes se pueden dejar en su estado natural para mostrar el color del ladrillo o la pizarra; incluso el enlucido más burdo puede resultar muy bonito, por ejemplo en un antiguo granero, un almacén o una casa de campo. Sin embargo no impongas este tipo de superficie en un lugar donde sería totalmente inadecuado, como un dormitorio.
Texturas contrastadas.
La mayoría de los materiales naturales tienen su propia textura -áspera, brillante, nudosa, crujiente, de tejido burdo, aterciopelada o lisa-, pero los esquemas neutros/naturales necesitan contraste en la textura para que sean más interesantes y variados, especialmente si no presentan mucho colorido o variaciones en el tono.
Combina la textura áspera del ladrillo y la piedra con una tela suave y transparente y añade luego el toque brillante del metal o de la cerámica. Filtra la luz a través de unos estores de tablillas, pon un acabado mate en las paredes y la madera y coloca algunos objetos de mimbre para crear unos esquemas campestres pero modernos.
Combinación de neutros.
En un esquema de un solo color neutro, debes tener cuidado de hacer jugar bien los colores. En un esquema basado en tonos crema o marrones dorados el tono general quedará amarillento y cálido, mientras que los beiges y marrones oscuros se relacionan más con el rojo. Si eliges un color blanco roto frío (virando hacia el gris) el efecto se acercará más al extremo azulado de la rueda de color.
Teoría del color
*Ten en cuenta la cantidad de luz que recibe una habitación, el tipo de luz y a qué hora del día, ya que esto determinará el grado de frío o calidez que tendrá el ambiente.
*Los detalles y accesorios naturales neutros se pueden utilizar para bajar el tono o aligerar y dar una sensación sedante a esquemas basados en colores más fuertes. Los neutros beiges crema quedan muy bien con los rojos oscuros, azules, verdes y terracotas. Los blancos rotos dan un toque sofisticado a las habitaciones con tonos medios; los grises más pálidos, el negro y el blanco entonan con los esquemas vivos y alegres.
*La madera es un elemento clave en los equemas de colores naturales. Se puede dejar al natural, encerarla, sellarla o bien añadirle color con tinte o con pintura. Sin embargo la madera siempre queda mejor cuando muestra su veta natural.
*No es indispensable que en una habitación predomine una decoración rústica para que pueda beneficiarse del ambiente cálido y sedante de los colores campestres. Estos tonos de cosecha y las texturas naturales del suelo de madera son lo bastante sofisticados y modernos para encajar en una vivienda urbana.
*La textura del mimbre pintado de blanco y de una colcha trabajada a ganchillo proporciona un ambiente suavemente rústico. Coloca plantas verdes y flores y completa con un espejo para ampliar visualmente.
*La pintura de aspecto envejecido de tono marfil y el suelo de madera sin tratar contribuyen a crear un ambiente encantador de la buhardilla que se aprecia en la fotografía. Todos los tonos son apagados y agradables a la vista. Cuando elijas una tela transparente para combinar esquemas de color suaves como éste, sumerge una tela de red o de encaje en té frío para que el blanco no quede demasiado brillante.
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