Ulises ordenó al timonel que virara en redondo.
Poseidón, por una vez generoso, concedió un viento favorable. La travesía se desarrolló sin contratiempos. Apenas un mes después de salir de Troya, pudo vislumbrar en el horizonte las recortadas costas de su pequeña isla. Retornaba a una existencia rutinaria y aburrida.
Ulises ordenó al timonel que virara en redondo.
Ulises ordenó al timonel que virara en redondo.