Revista Diario
Warning.
Publicado el 09 septiembre 2016 por RizosaHay un tipo de personas que me da mucho miedo. Hoy me he acordado de algo así, de golpe, sin venir a cuento, y me ha hecho pensar en que Beasinmiedo sí tiene un miedo muy gordo y no es de los fantasmas precisamente. La cuestión es que no sé qué es exactamente lo que caracteriza a estas personas, si es tan sólo un rasgo que se repite como un patrón o si son aspectos diferentes de las mil millones de personalidades distintas que pueden tener las personas con las que me topo.
Pero sí. En ocasiones sigue resonando en mi cabeza esa señal de WARNING que me ha acompañado toda la vida, aunque haya mutado bastante: cuando yo era una criaja se disparaba si alguien me gustaba demasiado y, ahora, cuando alguien no me gusta nada.
A veces conoces a alguien que parece interesante y entonces le preguntas sobre algo y lo ves hablar y hablar y escucharse su voz y enamorarse de sí mismo con cada palabra. Su vida es muy interesante; la tuya no. Después de quedar con esa persona muchas veces, un día te das cuenta de que ni sabe nada de ti realmente ni le interesa.A veces les das un beso y tú no sabes si lo están disfrutando o si están repasando mentalmente la lista del tres, porque su cara no muestra ni un ápice de emoción. Nunca exageran. Nunca levantan la voz. Nunca se muestran vulnerables.
A veces te dejas de jueguecitos de poder porque sabes que no sirven de nada pasados los 20, pero no. Tú intentas ser natural y sincera y ellos te miran como si fueras estúpida y no te enterases de cómo funcionan las leyes invisibles interpersonales.A veces te los encuentras caminando por la vida como estatuas de mármol, preciosas y perfectas. Reflejan la luz, sus ojos están ciegos ante lo que de verdad importa y, si las tocas, te hielas.
Me dan mucho miedo y me hacen sentir muy insegura aunque intente evitarlo. Con este tipo de personas nunca puedo ser yo misma aunque lo intente, y al final -cuando se alejan sin darte explicaciones, porque claro, no estamos en la misma onda- me dejan con esta mierda de sensación de no haber sido lo suficientemente inteligente, lo suficientemente guapa, lo suficientemente interesante, lo suficientemente nada.
Y que no, oye. Así sin retórica. Que os den mucho por culo.