Realmente nuestra despedida de soltera no la tenemos que organizar nosotras, pero es algo que ocurrirá si es que estamos de acuerdo en tener una.Y para gustos, colores. No a todas las chicas nos gusta el mismo tipo de despedida de soltera. A algunas les encantará que las humillen con disfraces horrendos, otras dirán que ni hablar de tener un boy, etc.
En mi caso, voy a tener dos despedidas. Una fue este pasado fin de semana con mis amigas de Valencia y la próxima es sorpresa (aún no entiendo porque ha de ser sorpresa la fecha, pero bueno, así lo han querido ellas) con mis amigas de Barcelona. Les di la disponibilidad de ciertos fines de semana, y así estoy, esperando que llegue el momento.
Mi despedida de soltera en Valencia fue de las típicas. Os cuento.
Mis amigas vinieron a recogerme el sábado a casa sobre las 15:30h. Me pidieron que me pusiera una falda azul marino y la parte de arriba blanca. Cuando llegaron a casa y las vi a todas vestidas iguales con un glamour del copón ya sabía a donde me llevarían.
Al puerto!
Allí me "disfrazaron" con unos complementos, algo muy light que les agradecí pues en comparación con otras novias yo iba super mona.
Empezamos la tarde con una fiesta en un barco junto con otras despedidas y realmente lo pasamos muy bien porque había mucho ambiente. Hacía una buena solana pero el aire que corría es lo que me ha hecho resfriarme.
Después del barco tuvimos una sesión de tupper sex. Ellas ya sabían que a mi no me hacía especial ilusión porque ya he hecho unos cuantos antes y pocas veces hay algo nuevo, pero como ya iba incluido en el pack y mi madre tenía curiosidad propuse quedarnos y echarnos unas risas.
Más tarde tuvo lugar la cena que estuvo amenizada con espectáculo de Drag Queens y a los novios de todas las despedidas nos hicieron salir a bailar una coreografía. Ahí me dio un poco de vergüenza, pero lo superé junto otras novias que también estaban cagadas como yo, je je.
Después del postre venía el turno del boy. Yo sabía que habría uno porque a una de mis amigas se le escapó (igual que a otra se le escapó que íbamos a tomar el sol en alta mar cuando aún no habíamos llegado al puerto, je je). Y aquí es cuando me puse muy muy nerviosa.Me sentaron en una silla con todas mis amigas (y mi madre) mirándome cuando de repente suenan unas sirenas. En cuanto vi aparecer al policia ya sabía quien era... el boy de la despedida de mi otra amiga!! Ventajas? Muchas! Ya sabía cual era el numerito y sabía que no iba a tocar NADA y que con lo que me daba en la frente no era otra cosa más que un pene de juguete, je je.
Al final resultó ser divertido porque cuando el chico le puso el culo cerca a otra amiga mía esta le dio una buena palmada que resonó en todo el local y que le dejó el culo rojo, je je. Y algo que me sorprendió es la repulsión que me producía tocar al chaval. Igual otras chicas dicen "oh que bueno está" y disfrutan tocándole los músculos. Pues yo no. Cada vez que le tenía que refregar el potingue que llevaba con olor a vainilla me daba un poco de asquete, je je.
Después de este espectáculo y de ser fotografiada más que nunca en mi vida y con mi madre diciendo "he hecho muchas fotos para que todo lo pueda ver tu love", nos fuimos a la discoteca a seguir adelante con la noche.
No aguanté mucho más y a las 4 ya estaba en casa para irme a dormir.
P.d.: También habrá resumen cuando tenga lugar la siguiente despedida de soltera. Vuelvo a estar cagada de miedo, ay!