El tenis siempre ha estado muy presente en mi vida. Cuando era un niño lo practiqué durante un tiempo, pero como no soy ningún Rafa Nadal, pasó a ser una afición, y el tenis se convirtió en mi deporte favorito. La emoción que siento viendo un largo e intenso partido de tenis, no la he sentido con ningún otro deporte. Siempre he pensado que en el tenis se pone lo mejor del ser humano, no hay lugar a trampas, ni juego sucio, sólo esfuerzo y lucha por cada punto, tesón y constancia para ganar un sufrido partido.
Por todo ello, cuando he visto que este año Wimbledon se vivirá de forma más real que nunca, me he alegrado mucho. Porque, gracias a Sony, las semifinles y finales de Wimbledon, tanto masculinas como femeninas, podrán verse en tres dimensiones. Quién lo iba a decir, que en tan poco tiempo la tecnología iba a permitir adentrarnos en el campo de juego, ser uno más del partido, sufrir cada juego y cada set con los propios tenistas, o incluso ver como esa pelota que se escapa, acaba en nuestro salón.
Vivir la experiencia del tenis en 3D es algo histórico. Nunca antes, en los 125 años de historia del torneo, se había hecho algo así. La señal 3D se distribuirá en directo a cientos de cines en todo el mundo. Para disfrutar de este acontecimiento deportivo, como nunca antes, sólo hay que entrar en la página de Wimbledon Sony, y ahí podemos buscar las pantallas de cine más cercanas dónde se proyectará semejante acontecimiento.
En el vídeo que acompaña a este artículo lo explican un poco mejor. Un pequeño recorrido por la historia del tenis, del centenario torneo de Wimbledon, que en 2011 volverá a ser inolvidable e histórico, no sólo por mostrar al mundo el ala y el corazón de este grandioso deporte, sino también por la posibilidad de vivirlo en 3D, la mayor experiencia audiovisual de todos los tiempos.