Cuando menos lo esperas, llega alguien que te devuelve la sonrisa. Alguien que esperas que haya llegado a tu vida para quedarse. Hasta hace nada no sabía que existías, y en tres semanas escasas te has ganado por entero mi amor. ¿Quién nos iba a decir la primera vez que hablamos que estaríamos así a día de hoy? Nadie. Absolutamente nadie. Lo único que se es que has llegado a mi vida convirtiéndote en el motor de la misma.