Revista Diario

Y la muerte nos separó

Publicado el 07 noviembre 2021 por Benjamín Amoedo De La Grana
Y la muerte nos separó
 

Ironías de la vida, aquí estoy a las 4 de la mañana sentado en la oscuridad, solo, absolutamente solo rodeado del ruido y el estruendo de la calle, pero solo, con decenas de personas a escasos metros de distancia y aun así solo en la oscuridad escribiendo, trabajar en una recepción por la noche es curioso pero no deja de ser bonito para reencontrarse un poco con uno mismo y pensar, fue Albert Einstein el que dijo que tener un trabajo insignificante potencia la imaginación y creatividad de las mentes extraordinarias cuando el trabajo en la oficina de patentes.

Me gustaría que mi madre estuviera aquí para poderle preguntar que hacer… a pesar de todas las dificultades y trabas que le ponía la vida, con todos sus demonios y todas nuestras peleas y diferentes puntos de vista al final era mi madre y sabía que decirme sin importar la circunstancia, en los momentos mas cruciales de mi vida creo que siempre supo exactamente que decirme y como decírmelo que quizás conociendo mi carácter es un aspecto más importante todavía si cabe, no es fácil lidiar con una persona competitiva inconformista y cabezona, sin embargo aunque parecía que no hacía nada ella siempre sabia como aconsejarme con pocas palabras, sin hacer ruido. Desde que ella no esta se nota que mi toma de decisiones cae en picado, no paro de fracasar o de tomar caminos equivocados y la verdad no sabría identificar del todo el por qué, a veces mi ambición y mis deseos van mas lejos que mis capacidades y habilidades, soy incapaz de leer mis limitaciones, siempre creo que puedo ser el mejor en todo y al final la vida acaba poniéndome en mi sitio y como consecuencia de ello me frustro de una manera que no os podéis ni imaginar, no puedo dejar de pensar que puedo ser mejor, que debo ser mejor, mi ambición, inconformismo y exigencia me marca y me tortura mas de lo que os lo podéis imaginar, como ya he dicho muchas veces ser inconformista esta muy bien pero también te lleva como en mi caso a no estar nunca a gusto conmigo mismo, es muy difícil vivir sabiendo que la persona que mas te aprieta y te presiona eres tú, porque esto te lleva a un cumulo infinito de ansiedad, cierto es que tiene también su lado positivo en la superación y posterior sensación de satisfacción personal, pero no deja de ser difícil saber que constantemente te estas apretando a ti mismo hasta el extremo.

¿Qué me diría mi madre si estuviera aquí?, como reorientaría mi vida y mi futuro como solo ella sabia hacerlo, con una palabra, un gesto, lo que sea, en el pasado puede que ella y yo llevásemos meses sin hablar, sin un hola, y sin embargo de repente ella detectaba que algo no iba bien, como solo una madre puede hacerlo, y con una simple frase aclaraba todas mis dudas y me indicaba lo que debía hacer, así siempre tome decisiones de las que me siento orgulloso en el pasado, gracias a ella, no como ahora que desde que no esta no hago mas que cagarla una y otra vez, ella, a pesar de ser una persona extremadamente enferma encontraba las fuerzas para luchar contra todo y pelearse con su cordura para encontrar un gramo de aire que dedicarme y ayudarme a ser mejor persona, incluso sin ella sigo mejorando para ser mejor persona, mejor doctor en mi profesión, mas humano, mas cercano a mis pacientes, para no cometer con ellos los errores que cometí con mi madre y no dejar que la distancia y el no expresar mis sentimientos me separe de la persona y de las personas que más quiero en mi vida, pero aun aprendiendo con y sin ti en días como hoy te necesito más que nunca aquí, para que te acerques a mi a las cuatro de la mañana, rompamos la distancia y las dificultades existentes entre los dos para que me escuches y me digas que tengo que hacer, no supe lo mucho que te necesitaba en mi vida hasta que la vida me lo enseño y te arrebato de mi mano.


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