Publicado el 05 diciembre 2017 por Ana Muñoz Cubero
@ContarEnBreve
La nieve llegó de repente. Como de costumbre de un día para el otro. Tengo frío, susurraste al oído. Entonces he de rescatar el astro que más calienta, pensé. Y el Sol se fue escapando, licuándose en el cuenco de mi mano.