Cada día se lucha más, sobre todo en los centros escolares, para que los niños, lleven una alimentación sana y equilibrada, llegándose a prohibir, la venta y consumo de bollería, aunque luego en los hogares, los padres, la gran mayoría no se toman muy en serio la alimentación de sus hijos, y comen demasiadas chucherías, bollería y comida basura, quizás porque es más cómodo, porque a los niños le gusta, ese tipo de comida, más que la dieta sana y los padres por no pelearse y que coman, les consienten todo.
Pero quien ha rizado el rizo, ha sido la madre de un alumno de un, colegio de Linconshire, que dejó a los profesores atónitos, cuando vieron, el sándwich, que había traído para comer, era un enorme sándwich de Smarties, eso caramelitos, que a todos nos gustan, pero no precisamente como comida principal.
Con este tipo de comida, no es de extrañar, que en Lincolnshire , tengan el mayor índice de niños obesos de todo el Reino Unido y hace pensar que si esa madre le pone ese sándwich, para comer, ¿qué le dará el resto del día? y es que me imagino el desayuno de la criatura, para desayunar bollos relleno de chocolate, para comer ya sabemos, para merendar Bollycaos y similares y para cenar tortilla de chocolate con guarnición de gominolas, seguro que si es así, este futuro obeso, no se dejará nunca nada en el plato.