El debate era interno: por una parte, sentía tranquilidad porque ella había dejado de sufrir; por otra me dolía pensar que se había ido. La echaba mucho de menos. El problema lo tuve durante mucho tiempo y fue el siguiente: Como su enfermedad fue tan larga, no conseguía recordar momentos buenos. Siempre que pensaba en ella la veía sufriendo -eso sí, pacientemente, era muy buena enferma-. Por más que lo intentaba, no lograba que vinieran a mi mente escenas amables o divertidas. Pasó mucho tiempo, pero finalmente lo logré. La abuela era divertida, lista, irónica, inquieta, curiosa, caprichosa, testaruda, elegante, presumida, defensora de cuidar las formas, criticona a veces, exigente y sobre todo muy familiar. Su logro, como el del abuelo, fue mantener a todos unidos. Y os aseguro que somos muchos y muy dispares. Pero seguimos juntos, porque aprendimos muy bien lo que ellos nos enseñaron con su ejemplo: que la familia es muy importante, y que siempre debe mantenerse unida.
Ya me acuerdo de todo
Publicado el 03 enero 2012 por BeatrizbeneitezEl debate era interno: por una parte, sentía tranquilidad porque ella había dejado de sufrir; por otra me dolía pensar que se había ido. La echaba mucho de menos. El problema lo tuve durante mucho tiempo y fue el siguiente: Como su enfermedad fue tan larga, no conseguía recordar momentos buenos. Siempre que pensaba en ella la veía sufriendo -eso sí, pacientemente, era muy buena enferma-. Por más que lo intentaba, no lograba que vinieran a mi mente escenas amables o divertidas. Pasó mucho tiempo, pero finalmente lo logré. La abuela era divertida, lista, irónica, inquieta, curiosa, caprichosa, testaruda, elegante, presumida, defensora de cuidar las formas, criticona a veces, exigente y sobre todo muy familiar. Su logro, como el del abuelo, fue mantener a todos unidos. Y os aseguro que somos muchos y muy dispares. Pero seguimos juntos, porque aprendimos muy bien lo que ellos nos enseñaron con su ejemplo: que la familia es muy importante, y que siempre debe mantenerse unida.