Hace tiempo que elaboro mis propios yogures en casa, no solo por la comodidad sino también por su calidad ya que la cadena de frio no se interrumpe en ningún momento, ni llevan conservantes ni aditivos de ninguna clase. Y por ello es mas facil mantener integras todas sus propiedades como alimento probiótico.
Los probióticos son aquellos alimentos que contienen microorganismos vivos cuyo consumo tiene efectos positivos para nuestra salud por su acción sobre la flora intestinal. Un tipo lo forman los yogures que son leche fermentada a base de bacterias lácticas como el Streptococcus thermophilus y Lactobacillus bulgaricus o acidofilus. Y en segundo lugar las leches fermentadas, de aspecto similar al yogur, que han sido fermentados por otro tipo de bacterias como las Bifidobacterias y el Lactobacillus casei imunitass.
Los yogures naturales al ser alimentos probióticos tienen efectos muy beneficiosos al contribuir al equilibrio de nuestra flora bacteriana intestinal y potenciar nuestro sistema inmunitario. También pueden ser tomados en muchos casos por aquellas personas con intolerancia a la lactosa.
Existen distintos métodos para hacer tu propio yogur y el más cómodo es utilizando una yogurtera, un electrodomestico que mantiene a la temperatura adecuada nuestra leche mientras fermenta. El resultado depende de las horas (menos horas resultan ligeramente laxantes, más horas una mayor acidez y contrarrestan las diarreas, el tipo de leche (entera, desnatada, de soja, de cabra...), y por último el tipo de fermento láctico utilizado.
CONSEJOS PARA ELABORAR YOGUR.
- 1 litro de leche semidesnatada.
- 6 cucharadas de azucar moreno.
- Un sobre de fermento o un yogur natural de marca.
Tomamos parte de la leche y la templamos en el microondas, disolviendo en ella el azúcar y añadiendo después el yogur. Removemos bien todo y se echa en cada uno de los tarritos de la yogurtera. Se introducen en esta, se enchufa dejándolos de seis a ocho horas. Una vez pasado el tiempo necesario, a nuestro gusto en acidez o espesura, se meten en la nevera y se pueden consumir durante unos diez días.
Esta es la receta básica pero en otras entradas ya os contare como convertirlos en yogures ricos en calcio, potenciadores de nuestras defensas, laxantes, astringentes, con frutas o con fructosa por ejemplo. Las yogurteras tienen un precio de 20 euros aproximadamente y os recomiendo que la compreis con tarros de repuesto. Por ejemplo la de la foto trae 7 envases y 7 más, por lo que no tienes que esperar a gastarlos todos para volver a ponerla de nuevo. Así te da tiempo de ir haciendo los yogures mientras todavía quedan tres o cuatro en el frigorífico.
Con leche entera queda un yogur más espeso y con leche desnatada demasiado líquido, por ello para bajar colesterol y con una densidad media utilizo leche semidesnatada. Si deseáis enriquecerlos podéis añadir además de los ingredientes anteriores de 1 a 4 cucharadas de Leche Desnatada en Polvo, cuestión de ir probando hasta encontrar el punto que mas guste en casa.