Líneas rectas en un universo de curvas

Hacía tiempo que no veía anime. Es mas, diría que desde que vivo en Japón salvo las de Ghibli a penas he visto largometrajes de anime.
Pero el otro día tenía me dio por ahí y vi 5 Centímetros por segundo, una película de Makoto Shinkai.

Había leído que las películas de este director suelen tener unos escenarios tremendamente realistas, y efectivamente me sorprendí reconociendo algunos de los sitios por los que paso casi a diario en esta película.

Sin embargo tal vez lo que mas me gustó fue que, si bien puede resultar algo empalagosa, la película muestra de una manera bastante real (al menos en mi humilde opinión) el ciclo de vida de los sentimientos y las emociones que somos capaces de experimentar.

Tal vez todos tengamos ese concepto de que solo hay un amor verdadero. Que si quieres a una persona es imposible enamorarte de otra. Que aquellos que caminan juntos a lo largo de toda su vida son mas felices que aquellos que se encuentran y desencuentran a lo largo del camino.

Novelas, películas, tal vez incluso el ejemplo que tenemos en casa, nos hacen pensar que sólo hay una línea recta en lo que a sentimientos se refieren.
5 centímetros por segundo nos muestra sin embargo que la vida está llena de encuentros y desencuentros, alegrías, penas y amores a destiempo.
Tal vez por eso me gustó tanto.

No se vosotros, pero yo a veces me enamoro en sueños.
Cierto que tal vez no dure mucho, pero a veces sueño con que me he enamorado y me despierto todavía con el corazón en otro lado. A medida que pasan las horas, los trenes y los paso,s el sentimiento se aclara. Pero de que alguna vez existió no me queda duda.

Alguna vez, por despiste me he enamorado en un semáforo, cruzando la calle o compartiendo un vagón de metro.
Me he enamorado de un recuerdo, de un olor, o de algún sitio.
Por supuesto que son enamoramientos que se pasan al rato, pero a caso no lo son todos?

Tal vez por eso, de un tiempo a esta parte he aprendido a disfrutar de estos pequeños ratos en los que parte de mi se va a vivir al lado de otra persona.

Ojo, no siempre son amores felices. A veces esos amores terminan terriblemente mal. Tienen una vida fugaz y dolorosa.

A veces también es cierto que son dolores merecidos, recuerdos de cosas pasadas y que el tiempo no logra borrar.
Cuando llegan esas olas, me consuelo pensando que soy mejor persona que la que era en aquel tiempo, que tal vez tengo mas perspectiva ahora… pero el dolor sigue ahí, y a estas alturas no parece que se vaya a ir.

A veces me da la sensación de estar buscando a alguien a quien solo consigo avistar de vez en cuando. Seguramente si la encontrara de frente no la reconocería.
Tal vez es que lo prefiero así. A lo mejor es que sólo quiero buscar sin encontrar, eso pasa de vez en cuando no?

Alguna vez me ha pasado también que, habiendo encontrado a alguien, los otoños han ido descorriendo cortinas y he terminado descubriendo a una persona diferente a la que buscaba.

Con el tiempo he aprendido a aceptar mi extraña búsqueda. Comprendo que a estas alturas este pasatiempo forma parte de mi naturaleza, o tal vez sea naturaleza humana?

No será tal vez que nos esforzamos en tratar de caminar en línea recta cuando el camino está lleno de curvas?

Tal vez por eso me gusta tanto salir de paseo por ahí. Para enamorarme en alguna curva. Para hacer mío el tiempo que paso respirando y no compartirlo con nadie mientras no me apetezca hacerlo.

Tal vez por eso siempre sonrío cada mañana al despertar a su lado, porque también hago mío el tiempo que decido compartir con ella.

Sea como sea, os recomiendo 5 centímetros por segundo si os gusta Japón, si queréis ver escenarios cotidianos de la vida en Tokyo y si de vez en cuando estáis cansados de caminar siempre en línea recta.

Ah, y la canción del final es esta