Londres, 1890. Juliet Braxton es una joven de origen estadounidense que vive en la Inglaterra de fines de la Era Victoriana junto a una abuela de férreo carácter, un tío amable, pero poco apegado, y un primo, por quien siente un profundo afecto fraternal. Su mayor ambición es regresar al que considera su hogar, en donde vivió una feliz infancia. Sin embargo, pese a contar con medios propios para hacer realidad sus sueños, no cuenta con la aprobación de su familia.
Robert, conde Arlington, vive en la tranquilidad del campo con su madre, la condesa viuda, una mujer
que muestra adoración por su hijo; lo único que Robert encuentra intolerable es la constante intervención de su madre en su vida, intentando convencerlo de que se case lo antes posible a fin. A él esto no le hace ninguna gracia, y procura mantenerse alejado de cualquier tentación, pero un accidente pone en su camino a Juliet.
Desde entonces, por un motivo u otro, sus caminos parecen cruzarse una y otra vez, y pese a que él hace todo lo posible por ignorar lo que esta joven le inspira, no puede evitar sentirse atraído y buscar su compañía. Ella, por su parte, temerosa de los sentimientos que Robert le inspira, y obsesionada con la vuelta al país que considera su hogar, procura mantenerse alejada... pero el destino les tiene deparadas muchas sorpresas.
Atracción, intrigas, ambición; pero, sobre todo el amor, son los pilares de esta novela.
Una vez que supe que nuestra amiga bloguera Aglaia Callia tenia una novela autopublicada, me hice con ella en cuanto surgió la oportunidad. Y cuando a principios de este año vi su mención en el reto Serendipia Recomienda (recomendada por Lecturina de No sólo leo), supe que iba a ser una de mis lectura en este 2016.
En busca de un hogar es una prenda de estilo romántico cuyo calor recuerda al producido por los tejidos de Austen y demás agujas del género y la época. Claudia se ha declarado con anterioridad fan de la citada, así que no es de extrañar que se vean manifiestas sus influencias.
Es lo primero que leo de Cardozo pero sé que no será lo último. Estamos ante una historia sencilla pero escrita con mucha delicadeza. La prosa de nuestra amiga bloguera me ha gustado mucho y me ha hecho disfrutar doblemente de un argumento por sí solo entretenido, es más, es esa prosa la que ha colocado esta novela entre mis favoritas de este año que está a punto de finalizar. A pesar de ser una ópera prima, sus notas suenan con la experiencia de quien ya ha hecho sonar las cuerdas anteriormente.
Fuente
Sí, es una historia sencilla, y sus diálogos no sólo le aportan dinamismo sino que, en mi opinión, son la guinda de este pastel que me he comido con placer. La novela se ambienta en la antigua sociedad victoriana y su protagonista, Juliet, conquista por su dulzura, inteligencia y valentía para desafiar (en la medida de lo posible) las reglas establecidas. Ella, especialmente junto a Robert, será la responsable del carisma que impregna muchos de esos diálogos.Y sí, intentará romper con las reglas establecidas, con lo férreo de muchas de las costumbres que caracterizan a la cultura anglosajona de la época; y vivirá y nos regalará una lección de amor.
Una historia de amor común contada con un cuidado extraordinario que viene a corroborar que hay autores noveles que merecen ser leídos con la misma predisposición que se leen aquellos ya consagrados. Eso sí, si el género romántico no es lo tuyo, esta prenda no es para ti.
De los hilos de este tejido han ido surgiendo otras prendas basadas en los personajes que laten en sus puntos, y puedo asegurar que acabarán en mi armario.