Hubo una vez , en un barrio cualquiera, aunque aquí me refiera a Vallecas, barrio popular donde los haya , Una época , no muy atrás en el tiempo, en el cual , la vida giraba entorno a una fuente.
Una fuente de granito , sin nombre famoso , que no pasara a la historia , con un grifo , y un enorme charco alrededor , el cual era síntoma de la actividad frenética , que giraba entorno a ella
Cubos de cinc , garrafas , hombres mujeres , familias enteras , esperaban su turno , para llenar sus recipientes .Todos pasabamos por allí , todos , en cualquier momento del dia, de la noche .Era el agua de la vida , y nunca mejor dicho.
Porque no hace mucho, aunque nos parezca lejano , en la casas , no había un maldito grito de ese bien, que hoy nos parece tan común.
Agua, fuente, para beber , agua para cocinar, agua para limpiar , agua para asearse .agua para vivir.
Y toda salia de esa fuente , de ese único grifo que había en la zona.
Ellas fueron las que regaron , las que dieron vida , a una generación , que, con el tiempo , salio del barrio, dando a las ciudades , futuro.
No me quiero olvidar de ellas, donde la mal llamada miseria , se mezclaba , en sus aguas , con dignidad , con ganas de salir adelante, de crear , de construir un todo por hacer.