Revista Literatura
compañero de viaje
Publicado el 03 octubre 2011 por Beatrizf
Era un poco frío en el trato y algo inexpresivo. Como compañero de viaje resultaba a veces incómodo, sobre todo si te tocaba sentarte a su lado en el estrecho asiento trasero del furgón. Decidimos dejarle que nos acompañara, no sólo porque no está bien discriminar a nadie y menos por no ser humano, sino porque a su lado nuestros móviles siempre tenían cobertura. Otra cosa, con él las chicas nunca tuvimos problemas para compartir caseta, y además no roncaba.