Revista Talentos
Distantes
Publicado el 16 octubre 2013 por Vicente Luis McDecidió romper con ella, su cuota de lágrimas había sido ampliamente rebosada, no estaba para soportar sus enojos, trufados de silencios prolongados, le había dedicado ocho años de su vida, con un resultado más que discutible.Nunca mas volvería a decirle ,nada, ni a dedicarle ningún poema, para que esforzarse en complacer a alguien que decide volar sin él.Su tiempo había pasado, si él hubiera sido un tipo rencoroso, le habría echado en cara demasiadas cosas, pero es mejor guardar silencio, resulta más caballeroso e higiénico, después de todo ella le odiaría de igual modo.En ciertos momentos es mejor no dar pretextos, basta con dejar enfriar las relaciones, cosa que era sin duda su especialidad.Ella no le echaría de menos, no era un tipo de los denominados inolvidables, ni mucho menos, un modesto locutor de provincias y aspirante a poeta, tampoco deja grandes huellas y él lo sabia sobradamente.Un príncipe oxidado no deja marcas a excepción de los crujidos al andar…Ella le olvidaría rápido, la distancia era su principal aliada.
