Revista Talentos
Ecocunas: bueno, bonito y barato
Publicado el 12 diciembre 2014 por Lauraproto¿Es posible pensar en muebles de cartón? ¿Existe la opción de innovar, cuidando el medio ambiente, optimizando espacios pequeños, y con poco dinero?
Pilar Fresnedo, diseñadora industrial, y su marido, ingeniero industrial, piensan que sí, y apuestan firmemente a ello. La concreción de la fábrica Ecobebés en Bariloche es una muestra.
-¿Pilar, en qué consiste el microemprendimiento?
Nosotros fabricamos ecocunas. Las personas que lo conformamos somos dos empleados, y cuatro socios; dos en la parte comercial, ventas, y dos más, mi marido y yo, en la parte de producción. La idea es ir incorporando empleados. El proceso es totalmente escalable, hoy realizamos cincuenta cunas diarias, con más empleados podrían lograr muchas más. Y no requiere más que el aprendizaje y tomarle ritmo.
La cuna está pensada para ser usada durante los seis primeros meses del bebé, primero por el tamaño, y otra porque el bebé después de los seis meses empieza a saltar, entonces ahí es riesgoso porque no es muy alta la distancia entre el colchón y el borde de la cuna, o sea que el niño se podría incorporar y podría caerse. Además es el tiempo mínimo recomendado para amamantar al bebé, que te tenés que levantar a cada rato de la cama de noche, y la cuna tiene la altura de la cama, está pensada para que la mamá no tenga que incorporarse como en el catre, acá te asomás y ya ves.
La cuna dura mucho más, la podés pasar de un hijo al otro.
-¿Cómo surge el proyecto?
A partir de un curso de EMPRETEC del Banco Nación junto con Naciones Unidas que realizó mi marido, en el cual el proyecto final era realizar un producto que no se estuviera haciendo en ese momento. Como ya habíamos hecho una cuna para nuestra hija, más grande, me pidió que le diseñara un moisés en cartón, y de ahí salió. Empezamos a armar seriamente el proyecto, nos llevó más de dos años, hasta que encontramos a la persona que nos hacía el troquel como nosotros queríamos, con el acabado perfecto, más el diseño, el registro, la patente, y demás. A la venta como producto estamos desde principios de este año. El gobiernode Neuquén ya nos encargó 3000 unidades. Si tiene aceptación la idea es prolongarlo en el tiempo.
Ya habíamos tenido experiencias con cartón. Yo cuando estudiaba ya hacía cosas en cartón. La idea en este caso es evitar parte del recorrido catre, moisés, cuna, cama… gastás mucha plata, los chicos crecen rapidísimo, después tenés que guardar cosas bajo la cama, gastaste un dineral en un mueble que después lo desechás casi intacto…
-¿Cómo es el proceso?
Es totalmente manual, pero seriado. Trabajamos con una empresa troqueladora de cartón de Neuquén, que le compran a su vez a una fábrica de cartón de la misma provincia. Ellos troquelan según el diseño que les pasamos, las imprimen y nos mandan las piezas cortadas e impresas, nosotros nos encargamos del resto del proceso, el prensado de piezas separadas finitas que se arman grupos de tres cartones. Se prensan, se arman los frentes, se pre doblan los laterales para que al usuario le resulte más fácil el armado, se cubre el borde con cinta, para evitar que se metan bichitos o que los chicos se lastimen, y un mejor acabado, y después se laquean y se pasa a la parte de empaque. El laqueado es al agua y se realiza para que puedan limpiarse fácilmente las cunas con un trapito húmedo, la preserva por más tiempo, y porque si el bebé se hace pis, por ejemplo, no le va a pasar nada a la cuna. El adhesivo también es al agua, y se utilizan productos que no dejen olor fuerte.
-¿Qué otros beneficios tiene?
Te la podés llevar a donde quieras, es muy liviana, pesa 2,6 kilos, nada más, queda dentro del bolso, con lo cual vos te la colgás en el hombro, agarrás al bebé en el otro brazo y salís. Se arma y se desarma en dos minutos. Y además se puede almacenar en grandes cantidades en poco espacio. La cuna viene en un paquete de 77 x 45 x 10 centímetros. Eso es toda la cuna, con colchón, chichoneras, todo. En 18 metros cuadrados podés almacenar 700 cunas. En caso de catástrofes como incendios, inundaciones, cosas así, se trasladan fácilmente en un conteiner.
Además claramente son reciclables totalmente. Si bien gran porcentaje del cartón es nuevo, solo es reciclada la parte interna, la onda, sí se puede pasar 100% a la cadena de reciclado. No llenás de más basura.
Comercialmente también lo bueno del cartón es que se puede imprimir, sale impreso con la publicidad y/o logo del cliente.
-¿Cómo es el proceso?
El costo para el usuario es de 500$, con el bolso, colchón, y chichoneras, que se realizan con tela de friselina, las mismas de las bolsas ecológicas, rellenas con guata.
A principio de año donaron cunas en el Hospital Zonal de Bariloche a los primeros nacidos de enero, que tuvieron muy buena aceptación en las mamás. Les pidieron si podían seguir ayudando, ellos donaron una 150 pero la realidad es que sin patrocinante es muy difícil. El hospital necesita 1000 cunas al año. Siguen golpeando puertas, tanto ellos como el hospital, a ver si consiguen el apoyo necesario.
Por cierto, estamos haciendo un seguimiento con las mamás, todas quedaron conformes, pronto vamos a compartir algunos testimonios en nuestra Fanpage.
-¿Cómo es el circuito de venta?
La mayoría al por mayor, por una cuestión de productividad. Los costos son muy elevados, los pedidos de cartón tienen que ser muy grandes, vender a particulares no es rentable. Igualmente al que llama y pregunta se le vende, porque también nos interesa, pero por el momento cuando salimos a vender buscamos volumen. Lo que no se puede hacer en esa cantidad pequeña es personalizar impresa la cuna, por ejemplo si la querés violeta y no verde, sí con autoadhesivo. A futuro la idea es tener puntos de venta, por ejemplo los locales de ropa o muebles de chicos.
-¿Se puede “intervenir”?
Sabemos de papás que le han puesto móviles, por ejemplo. Siempre que sea con criterio, interviniendo de manera balanceada, no hay problema. De todos modos la cuna es muy estable. Podés ponerle stickers, incrementar o cambiar las chichoneras. Y aguanta mucho peso. El otro día sacamos una foto con nuestros hijos parados adentro, la nena tiene cinco años y el nene dos (se puede ver en Facebook). El cartón, según cómo lo ubiques, tiene muchísima resistencia. Y el laqueado le aporta firmeza adicional.
-¿Tienen pensado realizar otros productos o modelos?
Sí, si bien por ahora nos vamos a mantener con la cuna, consolidándonos en el mercado, la idea es ir sacando otros productos, por ejemplo otro modelo para los seis meses en adelante, silla de comer, y otros. Estamos tratando de derribar el preconcepto de que el mueble “tiene” que ser de madera, esto de “¡oh, cómo, voy a meter a mi hijo en una caja!”… no es una caja, es una cuna. Cuando vez la cuna, la estética, la estabilidad, que no se dobla, no se rompe, que en chico está cómodo, seguro, se afianza el concepto de que se puede usar cartón en muebles. De hecho se usa a nivel mundial.
Yo siempre digo, la cuna se pensó como mamá, fue mi bebé la primera que lo usó, y siempre pensamos en su confort y seguridad.
Si te interesó este tema:
http://ecobebes.com.ar/
*Algunas de las fotografías fueron provistas por Pilar.