Que digo yo que más que a un café, más vale que os invite a un "polo flá", ¿no? Qué calor por Dios Santo...Hoy por fin se ha calmado el viento de levante en esta tierra que me quema los pies, y parece que el verano definitivamente se ha instalado en nuestras vidas.Nadie que no sea de aquí puede entender lo que el levante es capaz de hacerle a tu cuerpo aunque seas gaditano de los de toda la vida y parezca que deberías estar acostumbrado. Sólo los que vienen a vernos son capaces de compartir la sensación impotente de tener ese mar azul tan cerquita y no poder acercarte porque el viento lo impide en forma de arena asesina y un oleaje picado que nos pone en alerta amarilla.Así que hoy, a medida que la mañana avanzaba y el "huracán" fue retirándose del remolino de la puerta de mi casa, de la blancura de la arena seca, y del fondo de una parte del cerebro donde deja un dolor "molestón" y "achaparrao", todos notamos que el verano ha vuelto a hacerse presente.
Es curioso pero se nota enseguida. Se ve en la cara sonriente de la gente rellenando de cubitos las neveras, en el son parsimonioso de la vida cotidiana y en la alegría del patio de luces, donde cuelgan a estas horas las toallas de secar salitre y sacudir calores.Y es que mi tierra no es la misma sin mar, sin mojito y cervecita en la sombrilla. Este Cádiz...salada claridad que decía el poeta. Mañana playita como que sí.