Hasta que la muerte nos una

No sé si habéis visto, aquella preciosa película,yo sí y lloré mucho, titulada Siempre a tu lado, protagonizada por Richard Gere y Hachiko, un perro, que lo espera fielmente durante nueve años, después de la muerte de su amo y que está basada en una historia real, ocurrida en el año 1925 en Japón, pues en San Donaci, cerca de Bríndisi en Italia, también tienen su Hachiko particular.

Margarita Lochi, de 57 años, encontró a Tommy, un pastor alemán, un día de lluvia, hace siete años, vagando por los campos cercanos a su casa y decidió adoptarlo, era tanta la devoción que el perro sentía por su ama, que la acompañaba a todas parte, incluso a misa, donde se comportaba con todo su respeto perruno, como un fiel más y el sacerdote de la parroquia, le permitía asistir al oficio acurrucado a los pies de su dueña.
 Pero hace unos meses, Margarita murió y Tommy, asistió al funeral, inmensamente triste, y desde ese día, cada vez que oye las campanas, llamando a misa, se dirige a la iglesia, esperando encontrarse con su ama y asiste paciente, tranquilo y callado a todo el oficio.

A Tommy igual que a Hachiko, todo el pueblo le quiere y le da de comer, porque están convencidos que él seguirá allí, hasta el día que pueda volver a reunirse con su querida Margarita, más allá de las estrellas, pero lo que realmente necesita, hasta que ese momento llegue, es que alguien le dé un hogar, donde cobijarse y sentir el cariño de alguien, mientras espera la hora de ir a misa.
¿A qué es una historia preciosa, de amor, y del ejemplo que nos da una vez más un animal?