Historias

Sábado el sol aprieta duramente, sumergido en las aguas de la piscina donde mi maltrecha osamenta y mis quejosos tendones se relajan y me dan una tregua que me evita el consumo de fármacos tan usual en invierno gracias a la humedad y mal tiempo.He devorado con gusto un libro sobre la vida de un veterinario en la Irlanda de los años treinta.Una deliciosa novela titulada “Todas las criaturas grandes y pequeñas”.Una maravillosa forma de viajar en el tiempo, al igual que la trepidante obra de José Javier Esparza titulada “El Caballero del Jabalí Blanco”.Una trepidante historia de aventuras que me ayuda a soportar, los momentos de espera entre chapuzón y chapuzón.Para completar el círculo sigo con mi curso de gestor de redes sociales con la firme decisión de aprender a crearme mi propia marca personal.Este verano avanza veloz y no tengo tiempo de aburrirme.