La mejor forma de desbloquearte

Hay momentos en que simplemente no sabemos qué hacer. No estamos seguros ni motivados por algún curso particular de acción. Estamos estancados. Apenas sentimos algo más que cierta constante, ilocalizable y diluída incomodidad. Nada nos parece bien, no parece haber razón para siquiera intentar nuevamente (si ya lo hemos hecho antes) o para comenzar.

El mundo se nos aparece como una imposición en la que resulta difícil y confuso participar. Entre deberes, obligaciones y la incertidumbre, cualquier paso luce insuficiente. Estamos bloqueados.

Y estamos frustrados, sin disfrutar lo que sucede en nuestra vida. Y, para compensar, nos evadimos: andamos intensa y vagamente por internet, prendemos la televisión, comemos algo, dormimos un rato; en fin, buscamos formas de sedarnos.

Pero esta sensación de que podríamos hacer algo no nos abandona, no realmente.

Cómo desbloquearte
Esto es estar bloqueado, sin deseos de dar o recibir.

Lo que he descubierto en mi persona cada vez que, por la razón que sea, me siento así, es que debo expresarme.

La mejor forma de desbloquearte es expresarte como eres, crear algo.

No importa si es pequeño, el punto es hacer algo que muestre una parte fundamental de ti, ya sea tu forma de pensar o alguna de tus habilidades. Para desbloquearte tienes que compartirte, fluir, sacar tus talentos y atributos, mostrarlos al mundo.

Ensimismarte, preocuparte y retorcerte en ti mismo no funciona. Busca una forma de expandirte.

Por ejemplo, en ocasiones que me he sentido algo bloqueado y sin motivación para escribir un nuevo artículo, me he puesto a escribir de todos modos una pequeña idea. Y por sí solo, algo que creí de sólo algunos prárrafos, crece. Y al terminarlo, me siento alegre, más liviano y con ganas de hacer más cosas.

Cosas que puedes crear
Ahora, cuando digo ‘crear’ no me refiero estrictamente a alguna de las artes. Todo depende de ti. Piensa en estas preguntas: ¿Qué puedo hacer para los demás? ¿Qué experiencia puedo crear para los otros?

Algunas ideas:

• Escribe un artículo, un cuento, un poema. Y muéstralo, regálalo, publícalo.
• Dibuja algo, haz una breve tira cómica que muestre cómo te sientes y qué quieres. También enséñaselo a otros.
• Llama a alguien. Comienza o alimenta una amistad. Hagan algo juntos.
• Habla con un extraño.
• Prepara algo para otros. Cocina algo, dales una sorpresa, experimenta con algo y muestra los resultados, aun si salió terrible.
• Sé un voluntario. Busca algún grupo en que puedas ayudar y aportar algo.
• Aprende algo nuevo. Prueba aprender algunas palabras en otro idioma, ve un tutorial en internet relacionado a algo que te interesa. Presume tu nuevo conocimiento por mínimo que sea.
• Invita a alguien a concursar contigo en hacer algo que ambos saben hacer. Pon atención en hacerlo lo mejor que puedas.
• Haz un experimento.

Simplemente haz algo, ponte activo. Toma la primer acción que venga a tu mente y cuyo posible resultado te causa curiosidad. Muéstrate un poco, da un poco.

No lo hagas solo
Como has visto los dos elementos fundamentales de desbloquearte son tomar acción y tener alguien con compartir los resultados de esa acción. En este sentido, simplemente tienes que enfocarte en crear una experiencia compartida con otros. Puede ser mostrándoles tu arte, o acompañándose mutuamente en una actividad.

Piensa en que crecemos al estar en contacto con otros y que al aislarnos acabamos por disminuirnos. En soledad sentimos que tenemos menos que decir, menos que aportar; sabemos que estamos creciendo lentamente.

Crecemos en contacto con otros, con sus ideas, sus emociones, sus propias creaciones. La retroalimentación es lo que nos desbloquea, nos cambia, nos hace vernos y conocernos. Por eso cuando damos y compartimos, crecemos.

Entonces

• Pide ayuda a alguien.
• Comparte una labor.
• Ayuda a alguien, haz algo para otros.

Enfócate en aportar, o hacer tu mejor intento por hacerlo.

El miedo al rechazo
En ocasiones permanecemos bloqueados por el temor que tenemos de lo que los demás dirán de nosotros y de lo que hacemos. No sabemos si los demás quieren lo que tenemos. Hay poco que hacer para remediar esto sin tomar acción. Y quizá, también, la solución sea hacer poco: muéstrate poco al principio, arriesga lo mínimo al comenzar para que tu miedo no se dispare y te paralice.

Por otro lado, piensa que aquellos que critican usualmente lo hacen también para desbloquearse, sólo que en un sentido negativo. También están buscando una salida a no saber cómo expresarse, y sin riesgo. De hecho, si no creas algo por ti mismo, quizá corres el riesgo de convertirte en una de estas personas que sólo siguen y son meros expectadores de lo que otros hacen.

A la gente valiosa no le molestan tus intentos, todos podemos reconocer cuando alguien está practicando y conociéndose en su arte.

Lo demás es pura proyección de cómo son por dentro hacia otras personas en el exterior. No se trata tanto de ti como de ellos.

En este sentido, una sugerencia que te puedo hacer, que quizá sea el mínimo esfuerzo que puedes hacer para probar que sucede cuando te pones afuera en el mundo es crear un ‘tumblr‘.

¿Que qué? ¿Cómo funciona eso?
En un tumblr no es necesario que crees algo original, puedes simplemente crear un pequeño blog a partir de cosas que encuentras que te gustan y seguir a gente que hace lo mismo (puedes comenzar por el mío). Es anónimo, libre y breve. Entonces puedes darte la oportunidad de decir las cosas que has venido pensando sin gran esfuerzo.

Ve la reacción, ve cómo siempre hay alguien que comparte gustos contigo y que puede reconocer lo que haces. Aunque sea mínimo y pequeño.

Quizá después puedas probar escribiendo en un blog (pero, te advierto, toma tiempo y puede ser frustrante). O hacer algo creativo en facebook o twitter más allá de reportar qué haces a cada momento.

Ahora, todo esto es para desbloquearte, no para volverte adicto y encerrar tu actividad creativa a pequeños actos de efímera vanidad. Una vez que sepas que está bien expresarte como eres, busca crear algo de valor para otros. También puedes probar fuera del mundo virtual.

¿Cuál es tu motivación?
Lo último a tener en cuenta cuando estás bloqueado es valorar cuál es tu motivación para hacer las cosas. Quizá no quieres avanzar porque los objetivos de lo que sientes que tienes que hacer no son tuyos, no te importan personalmente. Quizá lo que estás pensando en hacer sólo beneficia a alguien, hacerlo no sería realmente compartir algo.

• ¿Por qué lo tienes que hacer?
• ¿Es para ti, para compartir y crear posibilidades?
• ¿O es para mantener cosas que no te gustan, en las que no estás fomentando en crecimiento de nada ni nadie?

Tienes que revisar tus talentos y deseos, tus miedos y motivaciones para desbloquearte. Cuando estás fluyendo y participando en la realidad es más fácil sentirte bien, útil, deseado, y agradecido por lo que tienes y puedes hacer en la vida.

Como alegóricamente tuiteé alguna vez:

‘Cuando no estoy creando algo, dando algo de mí, el mundo me parece una carga, una imposición, un régimen totalitario. Y yo tan anarquista.’

Y bueno, llegamos al final y otro ejemplo de que comenzar algo que puedes compartir es una buena manera de desbloquearte es este artículo. Creía que sería algo breve y ya tiene más de mil palabras…