En el Bonillo me contaron de ti...
La noticia sin duda me dolió mucho. No entendí que siendo tan amigas como éramos, no me lo hubieses contado. Además, ni siquiera me lo podía creer. Tú, la que siempre decías que nunca quedarías embarazada, ahora estaba preñada y sin novio.
Todos durante mucho tiempo te dijimos, que Gabriel era un crápula al que no debías darle ninguna oportunidad. Pero él quería carne y tú se la diste.
¡Y ahora qué! La niña perfecta que se movía por toda la facultad, mostrándonos aquel halo de ángel que poseías ¿cómo lo debes estar pasando en estos momentos
No es que me alegre, pero recuerda como intenté cortar tus bromas, cuando le ocurrió lo mismo a Helena. Ahora amiga, tienes que apostar por esa nueva vida que llevas en tú interior. No dejes que nadie manipule tus sentimientos, ni que fuerzen la decisión de seguir adelante. Tendrás que sacrificar algunas cosas, sin embargo, poseerás como premio un pequeño tesoro.
Tienes el apoyo de la familia y el de tus amigas más cercanas, con las que siempre podrás contar.