Muerto

He estado trasteando sin descanso, los inmensos recovecos del proceloso mundo de los cuadernos en internet o diarios personales. Me he quedado gratamente sorprendido de la cantidad de artefactos que funcionan de modo automático y te liberan de estar vigilante ante la pantalla.No puedo negar que cada día descubro una opción para hacer más cómoda mi vocación de columnista en internet, ahora entiendo el famoso principio de Pareto que decía que había que ser lo más productivos posible, en el mundillo de la red donde todo va contrarreloj en múltiples ocasiones.En algunos momentos me siento un poco abrumado y desubicado.Jamás he calculado lo que tardo en perpetrar mis desahogos, no me va luchar contra el tiempo más de lo necesario, sospecho que debe ser una sensación desasosegante, como jugar a la ruleta rusa con un revólver.He dejado atrás mis tiempos de suicida joven de mirada lánguida y mesta ,digna de un cadáver exquisitamente cuidado ,preparado para una inolvidable sesión fotográfica ,propia de un cartel promocional de una película del director de la novia cadáver, o de un texto vampírico tan en boga entre las mujeres indistintamente de la edad que se tenga…Ser mesto y atormentado, tiene su lado positivo, al menos, lo he descubierto recientemente, da para escribir unos cuantos desahogos, sin necesidad de recurrir a la tan traída y llevada clase política que satura radios, televisiones y periódicos, por el hecho de ser quienes son.Siempre he tenido vocación de cadáver andante, es realmente duro pasar desapercibido, pero lo he logrado se puede pasar por mi lado, sin necesidad de saludarme ,mi sombra me ha ayudado a ser discreto. Quise opositar a suicida pero sale demasiado caro…Maquinar planes y estrategias para viajes sin retorno cuando sabes que te vas a morir igual, no vale la pena adelantarse al hecho biológico, el cual llegara cuando el altísimo decida.Tampoco voy a dar el gusto de irme sin haber dado la guerra suficiente, a aquellos que me tienen manía y aversión, no me parece justo que sea ellos los que se diviertan a mi costa, así que mejor sacar un bolígrafo y desahogarme un rato, la muerte puede esperar.Me queda la enorme ventaja de saber que cuando me vaya nadie me echara de menos, se van ahorrar una gran cantidad de lagrimas, no tengo ansias por ser un ídolo de masas, ni siquiera en el momento del óbito.Gracias a mi odiada entidad bancaria, la cual, me ha obligado a firmar un seguro de vida que me prohíbe morirme recurriendo al suicidio durante al menos dos años, así que mejor buscar lectores para que duerman leyendo mis textos, lo cual no sé si es bueno o malo.Pensaba quitarme del medio pero no recordaba que tenía que cumplir un contrato con mi banco, la cuestión es no dejarme ser un fiambre fotogénico…Lo malo de no recordar algunos contratos tiene estas cosas. Hubiera preferido cumplir un tratado de otro tipo pero soy un cadáver casado con el banco, en vez de tener una esposa, como todo hijo de vecino…Me resignare a ser un poeta macilento, mesto, atormentado e inquieto.