Razones para odiar a fusa (jenn) díaz. belfondo

Señoras y señores,  desde la más profunda de las envídias voy a pasar a desglosar la razones que me llevan a odiar a Jenn (Fusa) Díaz. Son de toda clase y condición, lo reconozco y espero que ustedes las compartan conmigo:

1. Es guapísima, tiene un corte de pelo maravilloso y su cabello brilla con el sol. Por si eso fuera poco, además tiene un remolino en el flequillo que hace las delicias de propios y extraños.
2. Con veintipocos  años ha conseguido que me entusiasme con la poesía, no sólo con la que ella escribe, sino que además ha tenido el descaro de descubrirme a Wislawa Szymborska, que se ha convertido en mi poetisa de cabecera.
3. Y lo que es peor, con esos mismos veintipocos insusltante años, ha publicado dos novelas. Hoy me gustaría hablar de la más antigua : Belfondo. Belfondo es Fusa en estado puro, me decía el otro día alguien. Desde luego, Belfondo es pura genialidad. Belfondo es un compendio de personajes que trazan relaciones entre sí, que crean un mundo que parece paralizado, pero que en realidad no deja de moverse ante nuestros ojos. Belfondo es poesía.

¿Qué usted no sabe qué es Belfondo? Nada, nada... yo le explico. Es un pueblo creado por el Amo, figura que dispone a su antojo de la vida de sus estas personas, les da trabajo, formación, alimento, casa y hasta un dios al que adorar. Allí sobreviven personajes que respiran y se ahogan en ese pueblo, en esas casas, en la realidad que se creó por y para ellos. Atravesando sus ciento cincuenta y siete páginas conocerán a: Horario, el enterrador, que no sólo entierra sino que además escribe epitafios para todos; Beremunda, la prostituta del pueblo; Domitilda, la primera viuda del pueblo; a Sontano, el cura del pueblo; a Cuca, que se encarga de dar las horas en el campanario y se ha hecho la dueña del tiempo...
Por diecisiete miserables euros, adquirirá usted la primera novela de una jovencísima realidad de la literatura española y disfrutará ¡ya verá! Seguro que acaba odiándola lo mismito que yo. Tal vez un poco menos, porque usted ya era amante de la poesía y no necesitó que nadie le abriese los ojos.
Sólo hay una cosa que me consuela: al menos le gusta el fútbol y eso la hace imperfecta... ¿cómo?, ¿qué a sus ojos eso la hace más adorable? ¡Me va a dar algo, a mí me da algo!
Además, es necesario que sepáis que sus próximas obras aparecerán publicadas por Lumen y no puedo por menos que darles la enhorabuena a los miembros de esa editorial: se llevan ustedes un diamante.
P.D. Estimada Jenn, gracias por tu novela, sigue abriéndome los ojos por favor.