Recetario au pair: Carrot cake

¡Buenos días! Como veis, más americana no puede ser la receta. Aunque realmente su origen no es norteamericano sino inglés. He leído que la zanahoria se ha utilizado desde la Edad Media como ingrediente endulzador de los postres, ya que los endulzantes en esa época eran escasos y caros. Se cree que la popularidad del pastel surgió en Reino Unido durante el racionamiento de la Segunda Guerra Mundial y, más tarde, en 1960, paso a ser popular en los bares y restaurantes norteamericanos. Gustó tanto, que se quedó como postre habitual.
Con esta receta inauguro la mini sección de recetas americanas que tiene cabida dentro del 'Recetario au pair'. Iré probando y añadiendo las auténticas recetas por si queréis animaos a probarlas. Sabéis de sobra que la comida aquí no es para tirar cohetes, pero sí es verdad que hacen mucha y muy buena repostería, así que ¡habrá que aprovecharse de lo mejor!
¡Feliz miércoles!

au pair recipe

Pela y parte las zanahorias en trozos (cuanto más pequeños antes se cocerán, pero sin pasarse). Pon una cacerola al fuego con 1 litro de agua y ponla a hervir. Cuando ya esté en ebullición vierte las zanahorias y deja hervir unos 15 minutos.
Comprueba que las zanahorias están cocidas, escurre el agua y machácalas todo lo que puedas. Si las has decidido hervir enteras, también las puedes pasar el el rallador.
Precalienta el horno a 175°C (350°F).
En un bol mediano, mezcla todos los ingredientes secos, menos el azúcar y resérvalos.
En uno más grande, mezcla bien el azúcar con el aceite.
Ve incorporando los huevos uno por uno batiendo con una barilla la mezcla después de cada adición. Añade las zanahorias machacadas y mezcla bien.
Añade los ingredientes secos, que previamente habrás mezclado y bate durante unos 3 minutos a velocidad media.
Hornea a 175°C (350°F) por 60 minutos si el molde es alto (como el del bizcocho) o durante unos 40 minutos si el molde es rectangular y más bajo, como el de las tartas. Calcula que en el molde han de caber 12 tazas de agua.
Para el hacer la cobertura o frosting de queso, bate la mantequilla y el queso en crema a temperatura ambiente, añade la vainilla, e incorpora el azúcar glacé poquito a poco hasta que tenga la consistencia que te gusta. Es muy importante que lo hagas poco a poco para que no te queden grumos, como me pasó a mi. Cuando esté terminado reserva en la nevera.
Saca la tarta del horno y deja reposar unos 10 minutos. Desmolda y deja enfriar completamente. Paso importante, deja que se enfríe bien antes de poner el frosting por encima.
Decora si quieres con unas zanahorias y ¡a comer!