Revista Literatura

Reseña: El Apagón de Connie Willis

Publicado el 13 mayo 2015 por Cabaltc

Pese a mi afición por la ciencia ficción, nunca había encontrado una obra de esta mujer en los infinitos viajes que hago a mis librerías favoritas. No se si será porque no suelen traducirla al castellano o porque ha conseguido pasar inadvertida a mis escrutinios de la sección de ciencia ficción.

El caso es que no conocía a Constance Elaine Trimmer Willis, o Connie Willis para los amigos (y para sus libros). Pero cuando vi El Apagón, con su flamante edición de la editorial Ediciones B (a través de su sello Nova de Ciencia Ficción) anunciando a los cuatro vientos que esta obra fue ganadora de los premios Nébula (2010), Locus (2011) y Hugo (2011)… No pude resistir echar un vistazo a la contraportada.

Pero ya os hablaré del libro y mi opinión más adelante. No quiero desvelar el secreto antes de contaros quién es Connie Willis.

Connie Willis y su Apagón

Es extraño cómo, con más de diez novelas escritas y sus 11 premios Hugo y 7 Nébula, nunca me hubiera topado con ella. Vuelvo a decir que, quizás, su distribución en habla española no es tan amplia como en inglés y, debido a ello, no sea tan fácil de encontrar en una librería. De hecho, hoy he estado buscando más libros suyos y no los he encontrado, cosa realmente frustrante como ya os explicaré más adelante.

Al parecer Connie (nacida en 1945, dato curioso que mencionaré un poco más delante) empezó su carrera como profesora de enseñanza media, hasta que durante la década de los 70 decidió dedicarse a esto del novelismo.

Poco más se nos cuenta de su vida en las biografías que he estado ojeando, y prácticamente todas copian su contenido de su entrada en inglés de la wikipedia, pero en lo que todos parecen querer centrarse es en la cantidad de premios que ha cosechado esta mujer.

Lo que sí quiero destacar son las siguientes descripciones que parecen compartir todos sus libros:

  • Le gusta incluir los viajes en el tiempo como parte de sus narraciones.
  • Le apasiona centrarse en los personajes y su psicología.
  • Y mi favorita, extraída de una entrada en inglés sobre la autora: Her protagonists are typically beset by single-minded people pursuing illogical agendas. Es decir, que le encanta transmitir un agobio extremo en sus personajes mediante agendas imposibles, calendarios aun más imposibles, y una cantidad de tareas acumuladas todavía más imposible.

Entonces… ¿son estas unas cualidades propias de la ciencia ficción?

El Libro: El Apagón

La editorial me la ha vuelto a colar, igual que hicieron con El Leviatán de Babel. Si amigos, en este país está claro que una editorial tiene como objetivo vender a toda costa, sin respetar a sus clientes en lo más mínimo. Y utilizo la palabra cliente en vez de lector, porque al fin y al cabo eso es lo que somos para ellos. Os dejo que observéis la cubierta del libro antes de continuar.

Portada y contraportada de El Apagón de Connie WillisPortada y contraportada de El Apagón de Connie Willis

Vale, visto. ¿Cuántos libros dan forma a esta historia? ¿Uno verdad? No hay nada en la portada o la contraportada que indique lo contrario, ¿verdad? Error. Como bien explican en esta entrada de la wikipedia sobre los libros: Blackout and All Clear are the two volumes that comprise a 2010 science fiction novel by American author Connie Willis.

Vamos, que son dos libros que forman una novela.

¿Y cuándo me di cuenta yo de este pequeñísimo detalle? Cuando leí la última página de El Apagón y me quedé tan sumamente perdido y asombrado de no haberme enterado de nada que decidí buscar en internet explicación + El Apagón + Connie Willis. Y fue entonces cuando encontré esa pequeña pero vital información: El Apagón no es nada sin su continuación Cese de Alerta

Sin embargo, dejadme que os hable de El Apagón como libro independiente, dejando de lado que no tiene final y que la historia está cortada aun peor que cuando una cadena de televisión decide insertar anuncios en una de nuestras series favoritas.

Sinopsis

Universidad de Oxford, 2060. Los viajes en el tiempo son habituales entre los historiadores para investigar el pasado.

Tres jóvenes historiadores son enviados a la Inglaterra de la década de 1940 para conocer la épica de primera mano. Polly Churchill se desplaza hasta Londres en pleno bombardeo nazi para observar las vidas de empleadas de unos grandes almacenes. Mike Davies se hará pasar por periodista norteamericano para cubrir la evacuación de Dunkerque. Y Eileen O Reilly entrará a formar parte del servicio de una finca de Warwickshire a fin de observar los numerosos grupos de niños que llegan evacuados de Londres. En principio, nada se sale de lo meramente rutinario.

Pero al llegar a sus destinos, los historiadores advierten que han errado el momento de arribo no por unas pocas horas (como es habitual), sino por varios días.

Pronto resulta evidente que está a punto de suceder un tremendo desastre que podría perturbar tanto el pasado como el futuro.

Análisis

Viajes en el tiempo, la Segunda Guerra Mundial, un desastre que puede perturbar el entramado del espacio-tiempo… La verdad es que el resumen promete auténticas maravillas.

Sin embargo, muy a mi pesar, ese par de detalles que os comentaba antes (personajes, psicología, estrés y agobio por agendas imposibles,…) pronto pasan a tomar las riendas de la situación.

La narrativa de Connie Willis te transporta con mucha facilidad al estresante mundo de la preparación a los viajes en el tiempo, la cantidad de acciones que debe llevar un historiador antes de ser enviado al pasado, los problemas de la máquina del tiempo para poder encontrar agujeros de salto adecuados, los problemas con la planificación de los saltos… En definitiva, desde la primera página vives un agobio constante porque los pobres protagonistas no tienen tiempo material para poder hacer ninguna de sus obligaciones a derechas.

Es más que cierto que tiene una habilidad bastante notable para desarrollar situaciones de ese estilo. Sin embargo, esa es la tónica de todo el libro. Gente corriendo de aquí para allí, un sinfín de pequeñas y absurdas tareas que deben llevar a cabo los protagonistas en su día a día… desde coser un botón, hasta conseguir una falda, remendar una media o conseguir comida y cobijo.

Rápidamente te vas dando cuenta al adentrarte en sus más de 600 páginas de que no es una novela de ciencia ficción. Es más bien una narración de hechos históricos a través de personas que no pertenecen a la época. Sin embargo, el detalle de los saltos en el tiempo es meramente anecdótico, quedando relegado a un plano totalmente absurdo. No esperéis grandes disquisiciones acerca de las pequeñas modificaciones en el espacio-tiempo. Tampoco esperéis que os expliquen cómo funciona su máquina, cómo decide dónde pueden ir y dónde no, porque un historiador no puede visitar dos veces el mismo punto, etc. Y yendo un poco más allá, los personajes tienen bastante poca sustancia y bastante inverosímiles. Se supone que son expertos viajeros en el tiempo, pero no pasan por ser meros seres cotidianos que desempeñan labores cotidianas y que, salvo por sus problemas para volver a casa, no se preocupan en absoluto por ciertos temas críticos inherentes a los viajes en el tiempo.

Vamos, todas aquellas preguntas que un ávido lector y amante de la ciencia ficción quiere responder. Lo que os vais a encontrar en su interior es un relato extremadamente detallado de las vidas cotidianas de las personas que vivieron en Inglaterra en el año 1944 durante la Segunda Guerra Mundial.

Los bombardeos, la destrucción, los misiles no tripulados, el rescate de Dunkerque,… todo ello relatado hasta el más mínimo detalle mientras Connie nos explica cómo era la vida por aquel entonces. Pero sin un hilo conductor que lleve a alguna parte, sin una Historia que realmente te enganche.

Y, aunque me había prometido a mi mismo no mencionarlo, todo ello aderezado con una ausencia total de desenlace.

 Conclusión

No termino de entender por qué se clasifica a esta escritora como experta en ciencia ficción, ni por qué posee tantos premios Hugo y Nébula. Desde mi humilde punto de vista El Apagón es una novela histórica ambientada en la Segunda Guerra Mundial.

Si os gusta ese periodo de nuestra historia y os gustan las novelas que relatan acciones y vidas cotidianas (muy muy ajetreadas), entonces os recomiendo encarecidamente este libro. El detalle es asombroso y su conocimiento de la época y todos los sucesos es brillante.

Sin embargo, si lo que buscáis es una novela de Ciencia Ficción, con preguntas trascendentales sobre los viajes en el tiempo, personajes coherentes e inteligentes que se mueven en una época que no es la suya y de la que no pueden participar… Esta NO es vuestra novela. No tiene una historia definida y pasan decenas y centenas de páginas sin que realmente suceda nada. A la escritora le apasiona contarnos los mismos pequeños detalles una y otra vez y esparcirse por centenares de páginas con ellos, pero sin tener una Historia clara (salvo, claro está, contarnos cómo era la vida de la época) y en las que la mínima tensión que hay, empieza a aparecer en la página 450.

En mi opinión, una novela mediocre en general y un suspenso categórico como parte del género de ciencia ficción.

Escrito por David Olier para el blog El Rincón de Cabal

Sigue el blog por Email

Introduce tu dirección de correo electrónico para seguir este Blog y recibir las notificaciones de las nuevas publicaciones en tu buzón de correo electrónico.


Archivado en: Libros y Lectura Tagged: Apagón, Ciencia Ficción, Connie Willis, Crítica, Histórica, Lectura, Opinión, Reseña, Segunda Guerra Mundial Reseña: El Apagón de Connie Willis Reseña: El Apagón de Connie Willis


Volver a la Portada de Logo Paperblog