Reseña: El Ritual de Adam Nevill

Mis otras reseñas de Adam Nevill

Con este libro, El Ritual, cierro ya las reseñas de las tres novelas que Adam Nevill tiene publicadas en castellano. Aunque cronológicamente es su segundo libro, para mi ha sido complicado conseguir un ejemplar (está agotado en todas partes, posiblemente por una tirada bastante escasa) y he tenido que dejarlo para el final.

Os presenté a este autor hace ya unos meses con mi reseña sobre El Fin de los Días (que podéis leer si queréis pinchando aquí), y hace unas semanas os mostré mi opinión sobre su primer libro, Apartamento 16 (cuya reseña encontraréis aquí).

Apartamento 16, El Ritual y El Fin de los Días de Adam Nevill

En ambas elogié su capacidad para embarcarnos en una terrorífica aventura, de hacernos vivir y sentir la angustia de los protagonistas y de transportarnos junto con ellos a un mundo donde el terror y lo sobrenatural se juntan en un magnífico y sincronizado baile macabro.

Sin embargo, no puedo hacer lo mismo con El Ritual.

El terror de Adam Nevill

Antes de entrar al trapo con El Ritual querría hacer un breve repaso sobre por qué me gustaron sus otros dos libros.

Como os comentaba en esas reseñas, una de las estrategias que utiliza Adam Nevill en sus libros es el aislamiento de sus protagonistas, y es el primer elemento clave de sus aterradoras atmósferas.

1. En Apartamento 16 es un aislamiento menos físico (la ubicación es el centro de Londres), pero sí que es un aislamiento psicológico. Nadie puede escapar, nadie puede pedir ayuda.
2. En El Fin de los Días utiliza un recurso parecido. Los personajes se mueven libremente por el globo, viajando a distintas localizaciones. Aunque en todas ellas se ven envueltos en situaciones paranormales en las que sólo están presentes ellos mismos.

Ambos libros muy bien llevados en ese aspecto, en el que tampoco notas como lector que abuse de ese aislamiento. Son personas que se relacionan, tienen contacto con el mundo real, pero viven unas situaciones que los hacen especiales y de las que nadie más puede participar.

El segundo elemento clave son sus criaturas infernales. Sus presencias. Esos seres de otra dimensión que están presentes a lo largo de toda la historia y nos hielan los huesos.

No voy a entrar en detalle sobre cómo son en Apartamento 16 ni en El Fin de los Días, pero baste decir que están presentes durante toda la historia, haciendo que el lector nunca pueda olvidarse de ellas.

Sin embargo, en El Ritual Adam Nevill ha pecado en exceso del primer elemento clave y ha relegado a una posición despreciable el segundo.

El Ritual 2012, segunda novela en castellano de Adam Nevill

Pero veamos la sinopsis de El Ritual.

Sinopsis

Luke se reencuentra con tres antiguos amigos de la universidad para recordar los viejos tiempos y explorar una región salvaje del Círculo Ártico escandinavo. No tardará en descubrir que sus vidas les han llevado por caminos muy diferentes, de manera que a los obstáculos que presenta el terreno que atraviesan se añadirán las desavenencias que surgen entre ellos. Perdidos y hambrientos, los cuatro amigos están convencidos de que la situación no puede empeorar. Hasta que se topan con una desvencijada cabaña que esconde en su interior rastros de ritos ancestrales y de sacrificios paganos dedicados a una presencia que todavía habita el bosque. Una presencia inhumana que sigue de cerca sus pasos…

Y como colofón, debajo del título nos encontramos con un…

Hay cosas peores que la muerte…

Análisis

Sencillamente: esa sinopsis ya os ha contado el libro entero. Sigo esperando saber cuáles son esas cosas peores que la muerte…

Si la trama ya es un poco predecible (amigos cerca de los 40 andando por el bosque, poco preparados, intentan atajar por un bosque y… todo se tuerce), ese resumen no nos ayuda demasiado a poner unas grandes expectativas en la historia.

En mi opinión, no consigues empatizar con ninguno de los cuatro amigos. Son personajes ligeramente planos en los que sus miserias y sus reacciones son un tanto inverosímiles y cuestionables (partiendo ya de la base de meterse en un bosque desconocido por la humanidad…)

Como decía al principio, Adam Nevill abusa enormemente del aislamiento de los protagonistas: nos recuerda una y otra vez que están solos, que no han avisado a nadie y que nadie puede siquiera ir a ayudarles. Nadie sabe que están allí. Y así avanza prácticamente todo el libro.

Personalmente creo que, para hacer una historia larga con sólo cuatro protagonistas y un bosque, tienes que conseguir aportar muchos elementos extras que hagan que no quede todo en un paseo entre los árboles. Y, aunque esa sinopsis nos los promete, no terminan de encajar unos con otros.

Esa cabaña en la que tantas esperanzas podemos tener para con la historia, se queda en eso: una cabaña. Siniestra, si; macabra, muy poco; aterradora, algo. Cierto es que lo que sucede en ella y lo que ellos sueñan es una escena que me gustó bastante, pero habiendo terminado el libro, creo que esta está un poco deshilada del resto de la historia. Mucho componente psicológico, onírico y sobrehumano que se queda en mucho ruido y pocas nueces.

Luego está esa presencia. Un algo que se queda en una mera anécdota salvo en tres momentos puntuales. Tampoco ella consigue animar esta historia de solos en el bosque.

En definitiva, una historia bastante plana por la que cuesta avanzar. En la que lo poco que sucede es altamente predecible y que no sorprende en demasía.

Existe un giro inesperado hacia el último tercio que, de tan inesperado que es, pierde casi toda la credibilidad que podíamos tener. Y la resolución final del libro termina de quitarle el resto de esa credibilidad.

Conclusión

Con Apartamento 16 hizo una novela redonda en mi opinión. En El Fin de los Días creó una historia apasionante en la que le falló el broche final.

Sin embargo en El Ritual no ha conseguido encajar las piezas que nos intenta mostrar. El ritmo de la novela es bastante lento, hay mucha introspección del protagonista que aporta poco o nada a la trama y la criatura se queda en una pequeña sombra que poco o nada tiene que contarnos.

En definitiva, me volvería a leer Apartamento 16 encantado, podría volver a leer El Fin de los Días, pero no volvería a leer El Ritual.

Es una pena, porque podría haberle sacado bastante jugo a la idea, y porque empaña un poco su imagen. Pero no todos los libros de un escritor pueden ser siempre buenos.

Escrito por David Olier para El Rincón de Cabal

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Archivado en: Libros y Lectura Tagged: Adam Nevill, Bosque, Opinión, Reseña, Terror