Revista Talentos

Tormentos femeninos

Publicado el 16 noviembre 2011 por Lolitalola
No es que seamos malas, pero somos más intuítivas y previsoras, tenemos ese don de la predicción mental y el adivine de las pequeñas cosas malas, que los hombres no tienen ni conocen.
Por su puesto ni se me ocurre insinuar que seamos mejores, simplemente tenemos esa cualidad de "verlas venir". En definitiva y sin ánimo de ejercer ningún rollo feminista: Las mujeres somos de otra pasta.
Y no vaya usted a pensar que estoy dando la razón a aquellos que, desde una profunda meditación y despliegue de conocimientos humanos y profundididades de la mente dicen aquello de "es que las tias son toas mu malas", no señor!.Porque sé de buena tinta que esos mismos lanzan perlitas tales como "que wenas están toas las rubias""tos los tios son iguales" , "vista una, vistas todas" ó "esas tetas no son operás seguro...", por lo tanto, no es esa la actitud.Porque sepa usted que ni todas las mujeres son malas, ni todas las rubias están buenas, ni todos los tios son iguales, ni por supuesto las he visto todas para saberlo,  ni todos los pechos son naturales. Esto no es blanco o negro no, hay un arcoíris enteretico de mujeres buenas,  rubias feas, morenas guapas, tios distintos y tetas de silicona, por lo que, y sin ánimo de generalizar diré que cada sexo tiene sus intríngulis, pero eso sí, nosotras a veces, no sé si por suerte o por desgracia, pecamos de previsoras.
Normalmente, la predicción suele ser de cosas simples y cotidianas, no hablo de grandes catástrofes y por supuesto en ningún momento de números de lotería ni sorteos, son situaciones simples pero del día a día que son las que en realidad cabrean.
Le puedo poner un ejemplo para ponerle en situación: Un hombre ve a unos unos niños jugando en la calle, se lo están pasando genial, haciendo el bruto, corriendo saltando, pero con risas, muchas risas, es super divertido para ellos..., y se limita a sonreir y disfrutar el momento. En cambio una mujer piensa: "eso acaba mal". Y así es, y  en la mayoria de las ocasiones la predicción se cumple, eso ACABA MAL, la risa se transforma en llanto y aparece el chichón en la frente. Es así y no le demos más vueltas. Y es entonces cuando nos encanta decir aquello de "Eso ya lo sabia yo...." 
Y me acuerdo muchas veces de mi madre, cuando mi hermano venía lesionado de jugar a baloncesto y ella decia muy enfadada: "¡¡¡eso ya lo sabia yo!!!" ... y yo pensaba "coño, pues haberlo dicho y el pobre se habia evitado el trago..."  pero esas predicciones no se dicen, se piensan y se guardan en nuestra trabajosa mente para atormentarnos.Y con los años me he dado cuenta de que llevo en mí la viva herencia del don de la puñetera prediccion mental.
Y es que le diré también que en el fondo y cuando la predicción nos viene a la mente ocurre una cosa más, lo que predices es malo, tú lo sabes, ¡pero quieres que se cumpla! No sé si me explico, tú dices con la boca pequeña "ojalá me equivoque peeeero......... " pero no! tú no quieres equivocarte!! lo que quieres es decir "ESO YA LO SABIA YO" y quedarte tan satisfecha.
Y esto es algo que normalmente al género masculino no le ocurre y no sabe usted la envídia que me da!! ... es tan bonita la ignorancia....  ellos se limitan a cuando llega el mal trago apechugar con lo que toque, evitando así el sufrimiento previo del "ya verás tu como..." que tanto nos fastidia y atormenta.
Y me dará usted la razón en que eso no es maldad, es mala suerte leche!! Porque no vaya usted a pensar que la puñetera predicción sirve igual para el Gordo de la Lotería de Navidad, no no no... ni una sola vez cuando oigo el gordo de la loteria de Navidad pienso "eso ya lo sabia yo...." ni una sola... por qué? porque de eso no tenía ni puñetera idea... la predicción mental para todo eso no funciona. Solo vale para hacerte mala sangre.
Todo esto lleva consigo el que luego, cada una de nosotras tiene sus propias ramificaciones de la predicción mental. Yo en concreto tengo la faceta de los "porsis". "por si llueve: un paraguas en el maletero que nunca utilizo porque no me acuerdo de que lo llevo, por si hace calor: un abanico en el bolso que ya me dirá usted para qué lo quiero en Noviembre, por si tengo frío: una rebeca que nunca me pongo yo pero se ponen los demás cuando tienen frio, por si se manchan: un paquete de toallitas que se seca de no gastarlas, por si me duelen los pies: unos zapatos planos en una bolsa que nunca me pongo y luego me dan el coñazo toda la noche, por si los niños se  ponen malos en el viaje: un tarro de Dalsy en el neceser que termina abriendose y poniendo todos los botes de crema pegajosos.... etc etc etc
Y le cuento todo esto porque hoy llevo todo el día en ello, con la puñetera predicción en la mente y pensando que en el fondo, aunque no quiero que pase, me encantaría decir aquello que usted ya sabe, y ahí voy, luchando internamente conmigo misma para no cabrearme antes de tiempo y esperando el gran momento para soltar mi frase... .. ¿cree usted que soy un bicho raro? ¿o simplemente es la genética femenina? yo ya tengo mis dudas y tormentos al respecto, no crea..¿Y usted? ¿sufre mi mismo mal?¿Cual es tu ramificación? Por Dios que alguien me diga que también la tiene....

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