Una reflexión como cualquier otra.......Una crítica a un libro...... Una ventana a nuestra vida.....¿Quién Sabe?

Por fin, la casa tranquila, todo en la obscuridad y la armonía del silencio. Mi refugio me espera, los parpados pesan después de tantas horas, y sólo quieren cerrarse.
Sin embargo mi mente me reclama, ayer no pude dedicar ni cinco minutos a lo que más me gusta. Es como cualquier otro vicio. Uno se engancha y luego siente la necesidad, la ausencia.
Hay un libro que habla de eso precisamente, de adicción, pero en este caso a personas.
Lo escribió  Howard M. Halpern y se titula "Cómo romper con su adición a una persona". No sé si es práctico, ni si la teoría que en él se refleja puede llevarse a cabo, y lo más importante: ¿Consigues desengancharte de esa persona que te arrolla, día a día?
Hay un par de  capítulos interesantes "¿Por qué y cómo se engaña a sí mismo?-"él me quiere pero no sabe cómo demostrarlo".
¿Cuántas veces ha  pasado el ser humano por esta irracionalidad?- ¿Porque sólo queremos engañarnos a nosotros mismos?, para ver el lado de las cosas que nos satisfacen, y no la realidad del momento.
La dosis del amor que recibimos es importante, cuando falta, falla, necesitamos engancharnos a cualquier sueño, esperanza para recibir aunque sólo sea un amor virtual.
Surgen en nuestra mente ideas como:” sólo me siento vivo cuanto estoy con ella”, pero solo son ilusiones que nos forjamos poco a poco, día a día, en nuestra mente, en nuestro corazón.
Conocemos a una persona que nos deslumbra ¿Por qué?, por su forma de ser, por su encanto, por su voz: No hay  nada claro al respecto, a cada cual le puede suceder de una manera distinta, por una causa de lo más disparatada. Y poco a poco nos vamos enganchando a ella, a su conversación, a su compañía, hasta que ya no podemos ni tan siquiera dejar de observarla.
El segundo, es: "¿Por qué los sentimientos intensos de celos no significan que este enamorado?".
Escuchas conversaciones con otras mujeres. Reciben visitas de trabajo, de género femenino, Nos ponemos en tensión, miramos de reojo, el pulso se acelera, la mente se dispara a pensar disparates sin sentido: ¿Son esos temidos celos?
Perdemos la perspectiva de las cosas, es un sentimiento incontrolado de inseguridad, de falsa posesión.  ¿Es realmente enamoramiento?, El cariño también engancha y mucho, Puede llevarte a creer que puedes controlar a esa persona.
Peores son los sueños, cosas que no existen, que se pierden y se funden en el pasado cercano.
De una manera o de otra, debemos evitar esos sentimientos que nos enganchan, nos anclan a algo inexistente, nos crean una adicción que jamás debe existir.
La vida es tan corta que hay que vivirla  en todo momento, sin problemas, sin tabúes, sin tener  en cuenta, las habladurías de la gente (la mayoría de las veces, es pura envidia), disfrutar de cada segundo, Sin engancharnos de manera perjudicial para nosotros, pero cogiendo todo lo bueno y placentero de cada lugar, de las  personas, de cada instante.
Si lo piensas fríamente la vida es un cúmulo de segundos fascinantes que se van, se marchita, nos abandona……
Texto de María José Luque Fernández.Fotografía de Howard-schatz.