¡Vacaciones en Cuba!

Viaje soñado durante más de veinte años; un sueño cumplido. ¡Mucho para contar, imposible que entre en un post pero, les dejo algunas pinceladas!

Escapando del tremendo calor porteño, nos refugiamos en el "invierno" caribeño. Durante trece días recorrimos bastante de la isla, comenzando en La Habana, luego Holguín, Santiago, Guantánamo, Baracoa, Las Tunas, Camaguey, Ciego de Ávila, Cayo Guillermo, y La Habana nuevamente. La idea era salirnos del típico viaje La Habana-Varadero, y recorrer, conocer, compartir. Cuba no es solo un paisaje bello de playas paradisíacas, es una invitación al descubrimiento humano, histórico, político, económico, natural, cultural... A cada paso uno se encuentra con tesoros y sorpresas. Recomendación: no hagan el viaje que viene armado desde cualquier agencia de viajes, busquen aquellas empresas que les permitan armar el recorrido según sus intereses.Al cubano le gusta charlar, hablan fuerte, casi a los gritos, son muy alegres y desenfadados. Les gusta contar y preguntar. Están muy informados de lo que pasa en el resto del mundo, y todos tienen una postura tomada sobre el sistema político de su país, sea de un lado o del otro. Las mejores charlas son las que se establecen con los taxistas, que además son los mejores asesores de turismo. Y para recorrer fuera del "circuito clásico", son ideales. Por el contrario, no es recomendable viajar en avión dentro de la isla. El cubano no se estresa nunca, el avión sale... cuando se les da la gana, y para recorrer distancias cortas, uno se pasa en el aeropuerto más horas de las que haría en micro o auto. Además, el paisaje de la ruta es un absoluto placer, y los caminos en general están en muy buenas condiciones. A la hora de comer, lo más recomendable son los "paladares", restaurantes familiares que funcionan en casas de familia o pequeños locales. Son muy baratos, la comida es abundante, y todos los platos se acompañan con verduras, banana frita y arroz con frijoles, ¡lo más rico que he comido en mucho tiempo! (¿¿¿Alguien puede pasarme la receta, por favor??? Se llama congrí, o moros y cristianos, y es arroz blanco con porotos negros, los mismos de la feijoada).¿Qué se supone que trae un turista que viene de Cuba? Ron, (entre 4 y 8 dólares en la isla, 35 dólares en un súper de Buenos Aires), habanos, chocolate, café, remeras o gorritas con imágenes del Che, adornitos... En mi caso (y de mi pareja), el ron no me llama la atención, fumar no fumo, chocolates... lo de Cuba son riquísimos, pero yo vivo en una ciudad re chocolatosa! En mi valija venía café orgánico comprado a los productores locales (no es el tipo de café que tomamos en Argentina, pero lo compré... porque a veces no sé decir que no... je je), libros, muchos libros (se consiguen a muy bajo precio), mucha pero mucha música, tradicional y trova, arena, (sí, arena de la playa), caracolitos, cacao (sí, el fruto, regalo de unos productores que visitamos), semillas de flores que nos gustaron (¿cuáles prenderán en una ventana frente al lago Nahuel Huapi?), y cosas por el estilo. 
Para quienes venimos de un sistema social completamente distinto, en Cuba es imposible no reflexionar sobre quién uno es, qué hacemos, cómo vivimos, cómo consumimos, qué es lo verdaderamente importante... No importa todo lo que sepamos sobre la isla, vivenciarla es casi un auto-retiro espiritual, un llamado a desnaturalizar lo que creemos obvio.
Es muy difícil elegir entre todas las fotos, traté de seleccionar algunas representativas. ¡Espero que les gusten!

Hay fotos que son un clásico: Imagen del Che en un edificio gubernamental. Al lado hay otra de Camilo Cienfuegos. De noche se iluminan muy bellamente. El lugar es la Plaza de la Revolución, en La Habana, donde se hacen las convocatorias públicas. Frente, está el Teatro Nacional, donde tuvimos la suerte de asistir a un recital de Vicente Feliú.

Cruzando unos kilómetros por un túnel bajo el mar, se puede visitar en el Morro,  una fortaleza de la época de la colonia, la vivienda que habitó el Che (hoy museo), tomar una ruta a Varadero, ver La Habana desde otro ángulo, y claro, comprar recuerdos.

Maravillosos autos de época se ven por las calles cubanas, muchos de ellos son taxis. Por un momento, pensé que vería pasar a Dean Martin y Jerry Lewis, cantando despreocupados.

Absolutamente de todo puede pasar en estas calles. Acá, bailarinas en zancos por las calles de la Habana Vieja.

Cultura, historia, pasado, patrimonio. En esta foto, la iglesia más antigua de Cuba. 

Calle habanera, fuera del circuito turístico.

Cuba es historia viva. En esta imagen, el frente del Cuartel Moncada, en Santiago de Cuba. Antiguamente regimiento, hoy ciudad escolar y museo. Su fachada aún conserva el testimonio de los enfrentamientos en 1953 entre los hombres de Fidel y las fuerzas de la dictadura de Batista. 

Una calle santiaguera.

Parque Céspedes, en Santiago de Cuba. En este lugar Fidel Castro y sus hombres anunciaron la liberación del país el 1° de enero de 1959. El día anterior se realizó allí el acto por el 55 aniversario, presidido por el actual mandatario, Raúl Castro. 

Casa de la Trova, en Santiago de Cuba. Especie de bar con zapadas, de allí surgieron grandes próceres de la música cubana, como Compay Segundo. 

Cayo Guillermo. Arena blanca, agua esmeralda, calor y palmeras...

¡Imposible no embobarse con el paisaje de estas playas de postal!

Tomar un taxi en Cuba: autos modernos, antiguos, motos, caballos, bicicletas... todo sirve para ese propósito! El bombón de la foto es mi compañero de vida hace 17 años. Fierrero de alma, estaba en su salsa.

Campesino de Guantánamo, productor de café y banana. Charlar con los cubanos no tiene desperdicio, y por suerte, a ellos les encanta. ¿La seguimos en el próximo post?

¿Conocen Cuba? ¿Qué países quisieran visitar?
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¡ya continúa en el próximo post!