“…mientras haya en el mundo primavera, ¡habrá poesía!”, decía Gustavo Adolfo Bécquer. Estamos de acuerdo, la primavera carga de energía a los artistas y las composiciones emanan vida. Los colores, los olores, la vida abriéndose paso, todo nos contagia de felicidad y nos invita, en este caso, a fotografiar.
- No te pierdas las nieves de primavera, el contraste del blanco con el colorido del paisaje o de las propias estaciones, nos ofrece una gran oportunidad.
- Por supuesto, los amaneceres y los atardeceres, son siempre espectaculares, no iba a ser menos en primavera.
- Los animales comienzan a salir de su escondite y podemos capturarlos con nuestra cámara. Si estás cerca de ellos, recuerda que el flash les daña la vista y alteramos la tranquilidad del entorno, mejor prescindir de él y echar mano de un trípode.
- No olvides las reglas de composición y juega con ellas para conseguir el efecto deseado. Te dejamos un par de artículos: Normas de composición: la regla de los tercios y la proporción áurea y Fotografía de viajes: reglas básicas de composición.
- La primavera es un buen momento para hacer retratos en la calle con la luz natural y la belleza del entorno. Las sesiones con modelos o con nuestros seres queridos se vuelven más creativas, podemos jugar con la luz, la ropa y el fondo, las flores que nos rodean…En esta serie de artículos encontrarás algunos trucos muy interesantes: Retratos y luz natural.
¿Qué consejos aportarías? ¿Cuál es tu experiencia?