Revista Talentos
Durante siglos, ninguno había podido encontrar a otro de su misma especie, pero seguían buscando. Un día, por azar, se encontraron. Se miraron extrañados, se preguntaron qué eran. Se contaron sus temores, se esperanzaron, se abrazaron y lloraron. Entonces supieron que su soledad, como su tristeza, los acompañaría para siempre.