¿Cómo exponer la nieve?
La nieve es un motivo perfecto para salir y hacer fotos, pero nos presenta un gran reto: exponer correctamente la fotografía. La nieve refleja un gran cantidad de luz por tanto, cualquier otro objeto o sujeto de la composición saldrá demasiado oscuro. ¿Cómo solucionamos este contraste?
Existen varias soluciones
Si no disponemos de más material que nuestra cámara y no podemos disparar el RAW, la solución sería: utilizar la medición puntual, podemos realizarla con un elemento cercano, una piedra o tronco, que no sean muy oscuros, de esta forma, buscando un gris intermedio o un marrón muy oscuro le decimos a la cámara que esa es la medición correcta. Otra forma, es medir la nieve y sobreexponer.
Si podemos disparar en RAW, ese es el gran consejo. si realizamos una exposición incorrecta, al disparar en RAW se almacena toda la información que la cámara recabó durante la fotografía, de esta forma, podemos salvar la fotografía en la postproducción.
Si disponemos de material: el flash o un reflector pueden ser grandes aliados. En el caso de flash, el objetivo es compensar la iluminación. Si tenemos un fondo nevado y queremos sacar un objeto o a una persona en primer plano, la luz del flash nos ayuda a que no salga muy oscura la persona o el objeto.
Por otro lado, un reflector, nos ofrece un resultado más natural, pues lo que estamos haciendo es utilizar la luz reflejada por la nieve. De esta forma, evitamos los fuertes contrastes entre luz y sombra.
El balance de blancos también se verá influido por la nieve, si tu cámara dispone de un modo manual de balance de blancos, podrás elegir el tono o la temperatura de nieve de forma que quede un tono natural en la nieve. Si no tenemos el modo manual, seguro que nos ofrece el modo automático, podemos probar con él.