Tras un mes de silencio

Vuelvo, por fin, a este, mi rincón literario. Cómo había echado de menos actualizarlo, se me ha hecho un poco largo este tiempo. Pero ha sido por una causa de peso y ha merecido mucho la pena, así que aquí estoy de nuevo, más que dispuesta a aprovechar los cuatro ratos libres que me deja el estudio para dejarme llevar por las letras.
En este mes ausente han pasado, aún así, varias cosas interesantes. Como ya vine comentando por aquí en la entrada anterior fue el Recital de Primavera de Valencia Escribe, mi primera vez leyendo en público algo mío. Aquellos que estáis suscritos a la newsletter del blog ya habéis recibido el correspondiente correo (mirad bien en la carpeta de spam por si acaso se os ha colado ahí), en él os envié un enlace para que podáis leer en exclusiva los poemas que leí aquel día, así como uno que no me dio tiempo a leer pero que llevaba preparado. El resto de vosotros podréis tenerlo un poco más adelante, no os preocupéis.
Y eso no es lo único que dio de sí este mayo de silencio bloggero...

He vuelto a las andadas con TESACAD.
TESACAD ("The Endless Story About Creation And Destruction") no es ninguna historia, ni ningún proyecto de nada en realidad. He venido hablando de él desde hace tiempo (primer intento de definirlo) y siento que cada vez que vengo por aquí comentando que "lo he retomado" parece como si realmente fuese un futuro texto sobre el que hay que trabajar. Y en realidad es como he nombrado al "archivador" donde guardo mis ideas, al cuaderno que las contiene (el de la imagen, en concreto).
Cuando hablo de retomarlo, de trabajar en él, de estar metida en el mundillo de esas páginas, en realidad me estoy refiriendo a que estoy echando un vistazo a ideas de todo tipo que puedan servir, o no, para futuras historias. Hablo de que estoy ordenando notas porque tengo ya tanto en papeles sueltos que ya no hay quien se aclare. O estoy preparando el terreno para alguna historia en concreto de la que aún no he hablado, ya sea documentándome, haciendo esquemas, resumiendo la trama o lo que haga falta según el momento. Y esta vez ha tocado ordenar notas que tenía dispersas por ahí, recopilarlas y poner orden a algunas cosas a las que ya le había dado más de una y de dos vueltas.
Se me estaban acumulando los papeles con cosas por pasar a limpio. Algunas nuevas ideas decidieron sumarse a la fiesta. Estar en contacto con los cuadernos, antiguos terminados, actual, el de TESACAD (el oficial, el que contiene las líneas generales de los proyectos en los que trabajo o trabajaré en un futuro) me ha dado tantas ganas de volver a escribir, de dejarme llevar por las letras que estoy deseando que sea noviembre para apuntarme una vez más al desafío del NaNo.
Así, pues, he vuelto a junio cargada de ganas de escribir, de volver a contar por aquí, como hacía antes de que fuese opositora, todo lo que se me cruzaba por la cabeza mientras las historias crecen en mí y en papel. Y es difícil aguantar tantas ganas cuando hay tanto que hacer, tanto que estudiar, porque las horas de estudio no sobran precisamente. Pero bueno, se intentará aprovechar los cuatro ratos de descanso, como siempre.
Por cierto, que tengo que venir a reseñar algunos libros que han caído estos días. Y, por cierto, que aparezco en el número 14 de la Revista Valencia Escribe con el poema Su memoria perdura. Sé que está también disponible en Wattpad, pero ya que lo leí en el Recital y que me dijeron que les había gustado por qué no compartirlo ahí. Queda mejor que en Wattpad, para qué engañarnos.